En esta ocasión fueron las fuerzas sindicales las que ganaron el pulso a la Patronal de Almacenistas de Aceitunas. La huelga de toneleros y obreros aceituneros, que amenazaba con arruinar la salida de bocoyes, ha quedado finalmente resuelta. Se ha negociado con ellos sus dos principales reivindicaciones: un aumento de jornales y una disminución del trabajo.