El Ayuntamiento también tiene sobre la mesa otro asunto urbanístico: evitar que se construyan bloques de vivienda en el solar de las Escuelas del Ave María
El alcalde, Manuel Benítez Rufo, tiene sobre la mesa dos asuntos de índole urbanística de los que están pendientes muchos nazarenos. Por un lado, la posible venta a una inmobiliaria del solar actualmente ocupado por las ruinas de las Escuelas del Ave María; por otro, debe decidir si derribar o conservar la Cruz de los Caídos.
La preservación o no de este monumento está en consonancia con la nueva política de hacer desaparecer, paulatinamente, símbolos franquistas en Dos Hermanas. El cambio de nombres del callejero ya está en marcha y ahora toca decidir, sin romper el clima de reconciliación que propugnan todos los partidos políticos, el futuro de este céntrico monumento, con cierto arraigo en el paisaje urbano nazareno.
Una opinión generalizada, que podría convencer al alcalde, es la de conservar el monumento desposeyéndole de los símbolos políticos y los nombres de los caídos. Se convertiría, por tanto, como en otras ciudades, en un recuerdo al soldado desconocido, sin distinción de colores políticos. En breve conoceremos la decisión final.
En cuanto a las Escuelas del Ave María, el Ayuntamiento parece decidido a evitar que los tres mil metros cuadrados del solar se conviertan en bloques de viviendas, como pretende una inmobiliaria. Antiguos alumnos del centro (por cuyas aulas se estima que pasaron unos 30.000 niños durante más de 50 años) han manifestado su disgusto por el destino que se quiere dar a este edificio, estimando que el espíritu de aquella obra social, instaurada por Luis de Ybarra y su esposa, Concepción Gómez Rull, no ha perdido vigencia, y que unos terrenos que en su día fueron donados para una empresa de carácter solidario no pueden ser ahora objeto de especulación. El Ayuntamiento también ha recordado a la actual familia Ybarra (propietarios de la constructora) que estos terrenos han estado exentos de contribuciones e impuestos.
Una institución modélica
Las Escuelas del Ave María, creadas por la Fundación Ybarra en 1914, pretendían remediar los gran penuria de puestos escolares que había en Dos Hermanas. Su construcción se terminó en 1917 y sus instalaciones fueron consideradas modélicas en su época. Estaba constituida por amplias y bien ventiladas aulas, biblioteca, capilla, teatro, gráficos didácticos en relieve, jardines y zona deportiva. Mereció la visita del director de la Obra del Ave María, Andrés Manjón, así como por los reyes Alfonso XIII y Victoria Eugenia, prelados, jefes de Estado y ministros de distintos gobiernos.
El colegio fue mantenido a expensas de la familia Ybarra, hasta que, tras la muerte de Jose María Ybarra y Gómez, unos 700 alumnos se quedaron sin escuela y el edificio fue abandonado, hasta el punto de que hoy puede considerarse en estado de ruina.
