Estimado Sr. Toscano: he intentado varias veces hablar con usted y no ha sido posible. Desde aquí quiero contarle mi problema y hacerle algunas preguntas, que son las siguientes:
¿De dónde proviene el dinero con el que se hacen las viviendas sociales?
¿Cuál es su política social a la hora de adjudicar esas viviendas?
¿Qué baremos son los que emplean para determinar la necesidad de cada persona que la solicita? Y en consecuencia, adjudicarla o no.
¿Cómo se contrata el personal de servicios y cualificado de este Ayuntamiento?
¿Por qué no existe una bolsa de trabajo para contratar a los trabajadores de este Ayuntamiento, donde prime su preparación, profesionalidad y antigüedad?
Mi problema es el siguiente: he perdido el piso donde vivía y no tengo donde vivir. He ido a Asuntos Sociales y después de varias entrevistas con la asistenta social me ha comunicado que yo no reúno el perfil, que mi informe era negativo y, por tanto, no tengo acceso a esas viviendas sociales. No sé cuál es el perfil que hay que tener. Desde aquí yo quiero describirle mi perfil, que creo que es el de cualquier mujer trabajadora de Dos Hermanas. Una mujer de 47 años, sin trabajo, estoy casada y tengo una hija. No pertenezco a ninguna etnia, llevo una vida más o menos ordenada, no robo ni vendo droga. ¿Dónde está todo el trabajo que había en este pueblo?
La única salida que tenemos las mujeres de Dos Hermanas es ir a trabajar a Los Remedios o a La Motilla por 300 euros al mes limpiando casas. Éstas, unidas a los mil euros que ganan los maridos, hacen que mantengamos nuestras casas honradamente, Sra. Asistenta Social. Porque la mujer media tiene marido, aunque también tiene muchas necesidades para llegar a fin de mes.
Sra. Asistenta que ahce el perfil, Sr. Toscano, que es el que lo aprueba: ¿con mil euros mantienen ustedes sus casas? Probablemente sus salarios sean muy superiores. Las personas que no tiene su perfil no tienen acceso a ese trabajo bien remunerado de nuestro Ayuntamiento. No se le olvide a usted que su perfil actual se lo ha dado el Pueblo. No hay más que darse un paseo por los organismos oficiales, gente bien vestida, tecleando los ordenadores con dos dedos (personas que no han superado las oposiciones de acceso, ninguna tiene las 250 pulsaciones por minuto que se exige en la prueba, mayoritariamente).
En el parque como operarias, en los colegios como limpiadoras, me sorprende la gran cantidad de oro que llevan puesto (cadenas, pulseras, pendientes, etcétera). El oro es un artículo de lujo, no lo entiendo. Se les ayuda con trabajo porque son personas solas con cargas y mucha necesidad, reúnen el perfil según la asistencia social y por eso se les ayuda. ¿El oro y los coches de gran cilindrada que circulan por Los Montecillos son los elementos necesarios para tener el perfil? Si es así, lo entiendo. Los mil euros que cobra mi marido no nos da para oros ni todoterrenos, nos viene justo, justo para comer. Y, volviendo a Los Montecillos, yo no veo a mujeres solas o solteras con hijos, veo familias bien estructuradas, mayoritariamente de otra etnia, que no se casan por lo civil, sino por sus propios ritos. La diferencia de estas mujeres con las demás mujeres de Dos Hermanas está en el DNI, estado civil: soltera (aunque tenga cuatro hijos). En el mío y en el de la mayoría de mujeres de Dos Hermanas pone estado civil: casada. Pero todas tenemos muchas necesidades. Y todas teníamos que tener las mismas oportunidades si no hay viviendas sociales para todas.
