El nazareno Salvador Guijo Pérez sigue con sus proyectos sobre los monasterios de Sevilla con la publicación de su segunda entrega, El Monasterio de Santa Paula de Sevilla. Domus Romana Amplissima, que se publica nuevamente bajo el mecenazgo de la Real Maestranza de Caballería de Sevilla. Un trabajo, apunta el autor, «que abunda en la proyección científica del conocimiento del pasado del cenobio, a raíz de la puesta en valor de su riquísimo patrimonio artístico».
Esta obra nace como continuación del proyecto iniciado el año pasado, con la publicación del libro El Real Monasterio de San Leandro de Sevilla. Notas histórico-artísticas sobre el monasterio y su iglesia, con el que se pretende «poder ayudar a las religiosas económicamente, al mismo tiempo que se fomenta la cultura y su patrimonio, tanto material como inmaterial». La Real Maestranza de Caballería, añade Salvador, «pone en valor, nuevamente, la vida contemplativa, siendo la caja de resonancia donde cada año volvemos a hablar de las clausuras y la necesidad de estas para la vida de la sociedad».
Merecido reconocimiento
Al igual que ocurriera con San Leandro, «la ciudad de Sevilla debía un merecido reconocimiento a un cenobio que es marca de la ciudad por su importancia patrimonial, artística, histórica, etnológica, cultural, religiosa e, incluso, gastronómica», asegura Salvador.
La obra se abre con un «muy necesario» capítulo sobre la historia del monasterio que lo situará en el espacio y en el tiempo de esta comunidad única que la rama femenina de la orden jerónima ha conocido en la ciudad de Sevilla. Además, realizando un ejercicio de introspección y proyección, «se nos situará en el núcleo de influencias mutuas entre el monasterio y la sociedad hispalense en todos los engranajes que articulaban su vida cotidiana».
A continuación, se presenta el primer catálogo en una apertura sin precedentes de las puertas monásticas para ofrecer al lector la riqueza de su patrimonio con su espectacular colección de Niños Jesús. Un segundo capítulo, titulado como el propio libro, Domus Romana Amplissima, introducirá al lector en la documentación artística sobre el patrimonio inmueble y mueble del monasterio donde se pretende que vaya más allá de la obra artística y reflexione sobre lo que ve, pues detrás de la misma hay todo un elenco de realidades que justifican cómo es y por qué es. Tras este segundo, se abre el tercer capítulo que muestra un patrimonio perdido que constituyó la gloria y esplendor de este monasterio y como la Divina Providencia intercedió ante el soliloquio político de las desamortizaciones.
Libro misceláneo
Tras un segundo catálogo sobre el museo de Santa Paula compuesto a partir de los bienes suntuarios del convento y del propio legado del Ducado del Infantado, en su heredera, priora y madre fundadora de la federación de monjas jerónimas, Sor Cristina de la Cruz de Arteaga, cerraría la obra un cuarto capítulo sobre la exposición permanente inaugurada de manera premonitoria en el año 1976.
En conclusión, «estamos ante un libro misceláneo que no solo pone en valor el patrimonio artístico del monasterio de Santa Paula, sino que al hacerlo también proyecta la historia de la ciudad de Sevilla con una síntesis expositiva e investigadora de fácil y amena lectura, generando un momento excelso para el disfrute de la belleza».
Gracias a la intervención y empeño de Joaquín Guajardo Carmona, este escritor puede continuar con esta serie que el año próximo beneficiará a otro monasterio, como una nueva fórmula de financiación más efectiva que un determinado donativo puntual. La venta de los libros en el propio monasterio, en el caso de San Leandro, ya ha generado, asegura Salvador, «más beneficios que el coste de la inversión realizada sobre la misma, con más del 60 por ciento de la tirada vendida». Con el mecenazgo de la Real Maestranza de Sevilla y la cesión de los derechos de autor, tanto de los textos como de las fotografías, en favor del monasterio, esta obra será un aporte económico en cada ejemplar íntegro para sostener la débil economía del cenobio.