La Biblioteca Pedro Laín Entralgo ha montado una pequeña exposición sobre el marino Camilo Carlier, personaje del siglo XIX vinculado a la ciudad de Dos Hermanas.
La muestra sobre Carlier, que estará disponible durante todo el verano, está integrada por condecoraciones y títulos del marino, instrumentos marítimos antiguos, postales escritas a una amiga y la maqueta de un barco del siglo XIX.
De manera paralela a la exposición se ha dispuesto en un expositor con material relacionado con el mar, tanto libros como películas y documentales.
Camilo Carlier nació en San Fernando en el seno de una familia de marinos, siguiendo la trayectoria familiar finaliza sus estudios de Guarda Marina e inicia su carrera en el mar embarcándose en distintos barcos de la época: vapores, fragatas y corbetas.Visitó lugares tan dispares como: Santa Cruz de Tenerife, Cartagena, Puerto Rico, Filipinas, Cabo de Buena Esperanza, isla de Java, Hong-Kong y La Habana.
Con tan solo 21 años participó en la batalla de los Castillejos (1860), que resultó tan decisiva en la guerra de África, por la valentía demostrada en la misma le fue concedida la cruz de San Fernando. El joven marino iba subiendo puestos en su carrera militar, de alférez pasó a teniente y por último a capitán de navío, recibió numerosas condecoraciones y honores. Con 29 años casa con la señorita de Sanlúcar de Barrameda, Gloria Matheu, la flamante esposa tenía 19 años. El matrimonio no tuvo hijos.
A Dos Hermanas llegó, ya jubilado, en 1898 acompañado de su mujer y de su cuñada Eloisa. La casa que adquirió el matrimonio Carlier era la número 25 de la calle Nuestra Señora de Valme, haciendo esquina con el callejón de San Luís. Una casa que aún se conserva, aunque muy reformada. Durante los 18 años que el marino vivió en Dos Hermanas se implicó en la vida cotidiana de la villa y se vinculó a dos hermandades: la de Valme y la de Veracruz.