Juan Antonio Carazo recibió un anónimo para acudir a una cita y fue acompañado de dos guardias de paisano
La Guardia Civil detuvo ayer, 10 de enero, a un individuo que asegura haber recibido 6.000 pesetas para asesinar a Juan Antonio Carazo. El detenido, de nombre Salvador Alarcón y dueño de la Venta de Valme, citó al ex alcalde mediante un anónimo en un lugar de Dos Hermanas. Carazo, extrañado, acudió acompañado de dos agentes de paisano que detuvieron a Alarcón. Según su declaración tras el interrogatorio, estaba arrepentido del plan en el que iba a participar contra Carazo y lo citó para prevenirle.
El interrogado ha confesado que su suegro, el poderoso industrial de la aceituna y presidente de la patronal, Manuel Gómez Claro, le había entregado 6.000 pesetas para matar a Juan Antonio Carazo, a quien consideraba instigador de la huelga de aceituneros.
Esta noticia, aunque inquietante, al menos desmiente otra que en un principio se había extendido por Dos Hermanas, y es que Carazo había sido asesinado.
¿Complot sindical?
El diario “La Unión” se ha apresurado a acusar al yerno de Gómez Claro de inventar toda la trama, y ha llegado a calificar la noticia de un complot de las incipientes fuerzas sindicalistas. Hay que recordar que el pasado 5 de diciembre explosionó una bomba en el domicilio de Gómez Claro, atentado atribuido en un principio a los anarquistas, cuyos líderes (que no perdonan el papel de Claro de empresario intransigente) fueron detenidos tras la huelga del pasado noviembre.
