Hoy me siento en la obligación de escribir estas letras dedicada a mi tito Manolo.Sé que alguna vez te dije te quiero, lo que creo es que no te lo dije tantas veces como te lo merecías.
Tampoco te di nunca las gracias por llevar a cabo el último deseo de tu hermana Victoria, pues nos cuidaste siempre junto a nuestra querida tita Lupe con muchísimo amor. Mis hermanos y yo siempre te estaremos eternamente agradecidos.
Tito te vamos a echar muchísimo de menos, no te puedes ni imaginar cuanto. Eras el pilar que sostenía a la familia Fontalba. Aprenderemos a vivir sin ti, pero nos va a costar muchísimo y sabes de sobra que siempre estaré pendiente de tu Guadalupe, Lupita, Silvita y Francisco, sin olvidar a tus niños, los que te hicieron, si cabe, el abuelo más feliz.
Tito lo que me hace sobrellevar este dolor es que ahora estás junto a mi mamá y que desde arriba siempre nos guiaréis. Te fuiste sin que yo pudiera darte el último besito, pero me quedo con el sonido de tu voz cuando me dijiste que te encontrabas bien, y a las poquitas horas te fueras.
Guardaré siempre en mi corazón la palabra “vacila”, era tuya y con ella veo tu cara.
Muchos besos allá donde estés, de mis niños, que te han querido como al mejor abuelo. Gracias por lo bueno que has sido para nosotros.
