La medida, según los campesinos, acabaría con el hambre del pueblo, y para los propietarios es ilegal, injusta y “comunista”
El Ayuntamiento de Dos Hermanas ha aprobado una ordenanza revolucionaria y sin precedentes en ninguna población andaluza ni extranjera. Se trata de obligar a los propietarios de tierras agrícolas a pagar un arbitrio para crear un fondo con el fin de emplear a los obreros campesinos en caso de desocupación, calamidad, lluvias abundantes, sequías o pérdidas de cosechas. “Una solución”, aseguran desde el Ayuntamiento, “para acabar con el hambre del campesino”.
La decisión ha recibido el aplauso de otros ayuntamientos con el mismo problema, como los de Osuna y Utrera (que ya se han apresurado a imitar al de Dos Hermanas) y la felicitación de, entre otros, el ministro de Trabajo, marqués de Guadel-Gelú, o el gobernador civil, marqués de Torrenueva. Por su parte, la acogida de las sociedades de obreros ha sido magnífica, llegando la Sociedad de Obreros Agrícolas “La Razón” a pedir en un comunicado una distinción para el alcalde, Fernando Rivas y su secretario, Juan Tamarit Martel, artífices de esta medida que, desde el lado del propietario, ha sido calificada de “comunista”. Defienden la tesis de que la aportación a ese fondo debería ser voluntaria y nunca un arbitrio obligatorio.
Así lo ven unos…
Extracto del comunicado emitido por la “Sociedad de Obreros Agrícolas La Razón” de Dos Hermanas al ministro de la Gobernación:
“(…)Es innegable que esta ordenanza soluciona rápida y armónicamente uno de los conflictos sociales más difíciles de resolver en Andalucía. Se evita con ello el que los patronos, en su mayoría, nos nieguen el único medio de vida que tenemos, el trabajo, pues la limosna que nuestra dignidad rechaza no es solución de ninguna clase, y desaparece de nosotros el justificado temor de no tener qué comer ni qué darles a nuestras familias cuando las sequías o lluvias continuas se presenten amenazándonos. (…) Es por ello que suplicamos a V.E. una distinción para el señor alcalde como premio a su desinteresda labor en beneficio de la clase proletaria…”
….y así lo ven otros
Extracto del artículo del propietario Fernando de Contreras en el Boletín de la Cámara Agraria de Sevilla, ante el temor de que la iniciativa de Dos Hermanas pudiera extenderse a otros pueblos:
“La medida es ilegal. Es el estado o el municipio el que debe soportar el paro forzoso, pero nunca una clase determinada.(…) Si el ayuntamiento quiere conjurar el paro forzoso debe exigir el natural sacrificio a todos sus contribuyentes. No se diga que es misión única de los propietarios de fincas rústicas. ¿Por qué? Si hay hambre a causa del paro, los comerciantes venderán menos y, en una palabra, todos los sectores de la localidad sufrirán las consecuencias del trastorno. Generalizando el sistema de Dos Hermanas, los obreros parados de toda España tendrían que vivir a costa de dos grandes núcleos sociales: los terratenientes y los industriales”.
