Tras el recital murguista en el Centro Mercantil, se improvisó una manifestación de los liberales
Mucho ambiente carnavalero se ha vivido en el Paseo de Federico Caro, con una verdadera “epidemia” de murguistas con brillantísimos cuplés. Los salones Ideal y Español se están viendo muy concurridos, haciéndose un derroche de serpentinas y letras agudas.
Y es que la actualidad política y la festiva se entremezclan en estos días de carnaval. No sólo porque casi todas las coplas sean alusivas a la administración municipal y a la corporación saliente, sino porque estamos a las puertas del nombramiento de un nuevo alcalde y existe una impresión muy desfavorable entre el elemento obrero en el caso de que se cumplan los rumores que corren. Se dice que el ex alcalde Manuel Andrés Traver está intentando a todo trance que le suceda en el cargo un incondicional amigo suyo, el concejal Antonio Peña Sánchez, que para los sectores liberales no ofrece garantías de cambios ya que pertenece a la derecha más rancia. Los concejales que tomaron posesión el pasado 26 de febrero ya han manifestado su enérgica protesta por este rumor (enviando un escrito dirigido al gobernador civil) pero hasta ahora no se había pasado a la acción.
No más caciques
El pasado domingo de piñata se dio un recital murguista en el Centro Mercantil. Tras la actuación, muy aplaudida, cundió entre los socios la idea de realizar una manifestación de protesta. A la cabeza de la misma marchaban los señores Martínez, Carballido, Gómez Claro, Zambruno, el ex alcalde Carazo y otros significados elementos de la política, el comercio y la industria nazarenos, que eran vitoreados con entusiasmo. La marcha, formada por personas de todas clases, recorrió las calles Reina Victoria, Paseo Federico Caro, Real, Constitución y Santa María Magdalena. A las puertas del Mercantil, Carazo pidió que la manifestación se disolviera con orden y que se esperaran las decisiones políticas.
