Comenzó en el waterpolo con 14 años y ahora es entrenador del CW Dos Hermana
Rúper Sánchez comenzó la práctica del waterpolo en la piscina de la barriada de San Hilario. Con 14 años, muy pronto estableció vínculos con este deporte, puesto que en adelante se hizo socorrista y monitor, siempre vinculado con el mundo acuático. Al no haber piscina cubierta por aquel entonces en Dos Hermanas, se fue a jugar al CN Sevilla (Trastamara), en donde estuvo un total de siete temporadas, en las que se proclamó todas las temporadas campeón de Andalucía, y disputó cada año la fase de ascenso a Primera División. Además, perteneció también a la Selección Andaluza Junior.
Con la nueva construcción de la piscina cubierta municipal de la ciudad, en el complejo de Ramón y Cajal, se constituye el CW Dos Hermanas, con representación de los equipos que participan en las ligas de verano, ya que es el momento en el que se produce un crecimiento espectacular en esta disciplina. De hecho, se alcanza hasta los ocho equipos (Vistazul, Las Portadas, Entretorres, Federico Mayo, CN Dos Hermanas, San Hilario, La Motilla o Patronato, entre otros).
En esta primera fase, Rúper Sánchez se hizo presidente del club, y pronto compaginó su faceta como jugador del CN Sevilla con la de entrenador del CW Dos Hermanas. En el año 1997, decidió acabar su etapa como jugador del conjunto sevillano, y se entregó por completo al cuadro nazareno como jugador y entrenador.
Vinculación nazarena
Aquí empieza Rúper lo que sería su unión definitiva al waterpolo de la ciudad. Consigue ascender al equipo a la Primera División andaluza, y su trabajo se vio inmediatamente recompensado con la consecución de títulos. Primero fue el Campeonato de Andalucía Juvenil en la campaña 1997/98. Al año siguiente se hizo con el título Junior, y posteriormente, la liga femenina y la Liga Absoluta masculina, jugando campeonatos de España en todas estas categorías.
En la actualidad, son referentes en toda la provincia los dos equipos absolutos del CW Dos Hermanas, tanto el masculino como el femenino. Ambos se han proclamado campeones de Andalucía las últimas tres temporadas. El femenino, en concreto, lleva seis temporadas en División de Honor.
Durante estos diez años, Rúper ha dirigido a todos los equipos del club nazareno y, además, ha sido entrenador de la Selección Andaluza Infantil, Junior y también de la Absoluta en algunas ocasiones. En la campaña 2006/07, dirige al equipo Senior femenino y el Infantil mixto, coordinando el resto de las categorías de la entidad.
Buenos resultados
La inauguración de las piscinas en la barriada de Montequinto ha hecho que se experimente un notable crecimiento de alumnos en las escuelas deportivas municipales. Así se está llevando a cabo un buen trabajo en la cantera. Tanto en masculino como en femenino, desde la categoría de Benjamín hasta Cadetes se cuenta un total de 120 deportistas. En lo que va disputado de temporada se ha ganado ya el campeonato de Andalucía Junior femenino (con clasificación para el campeonato de España incluida) y la Liga de Andalucía absoluta femenina. Por su parte, el conjunto masculino lidera la Primera División Andaluza Senior. El Infantil mixto se ha clasificado para la fase final del campeonato de Andalucía, que tendrá lugar en Granada el 18 de marzo.
Dilatada trayectoria
Rúper Sánchez comenzó como socorrista en el año 1989, y en la actualidad posee la titulación de entrenador superior de natación y waterpolo. Tanto sus estudios como su trabajo siempre han estado vinculados al mundo de esta disciplina deportiva. En el año 1995, concluyó su carrera de Magisterio e Educación Física. Actualmente, trabaja como coordinador deportivo del Patronato Municipal de Deportes, desde el año 2000.Formación de jóvenes
Considera que la formación es muy necesaria, y por ello actualiza sus conocimientos con cursos y jornadas didácticas. Según indica, “la familia tiene un papel principal: pero los educadores y técnicos también aportamos nuestro granito de arena. El trabajo que desarrollamos en las escuelas deportivas es fundamental para primar valores positivos, como el respeto, la participación y el compañerismo”.
