El Partido Popular Andaluz lleva 13 años presentando continuas iniciativas en el Parlamento de nuestra Comunidad Autónoma, solicitando un proceso de modificaciones y mejoras del Impuesto de Sucesiones y Donaciones que finamente lo reducirían, en el ámbito familiar, a una tributación simbólica del 1% a efectos de control y lucha contra el fraude fiscal.
Por ello en el pleno ordinario de hoy viernes el grupo municipal del PP presentará una moción con la clara intención de declarar a Dos Hermanas como municipio libre del Impuesto de Sucesiones y Donaciones en el ámbito familiar, ha señalado su portavoz Mª Carmen Espada. Quien considera que “se trata de una injusticia que nos empobrece y fomenta al éxodo de contribuyentes a otras comunidades autónomas”.
En España, se explica en la moción, el Impuesto de Sucesiones es de competencia autonómica desde 1987. De esta forma, la Junta de Andalucía en el ejercicio de sus competencias cedidas en el Impuesto sobre Sucesiones y Donaciones ha provocado un agravio comparativo a las familias andaluzas respecto a familias de otras comunidades autónomas en las que se ha regulado unas disposiciones que contemplan un mejor tratamiento fiscal, especialmente en el ámbito familiar.
La solución dada por la presidenta de la Junta, Susana Díaz, de devolver el tributo al Gobierno de la Nación, “ no es más que un ejemplo de la incapacidad del gobierno socialista de la Junta de Andalucía”, añade España, que cuestiona que “la señora Díaz sea capaz de solventar los problemas nacionales, cuando es incapaz de resolver los de su propia comunidad”.
Por todo ello, el Grupo Municipal del Partido Popular de Dos Hermanas pedirá que el resto de formaciones políticas, se unan, declarando Dos Hermanas una ciudad libre de Impuesto de Sucesiones y Donaciones, mostrando así su rechazo a la situación que vienen sufriendo a este respecto tantas familias de nuestra ciudad.
Asimismo, solicitarán que se inste a la Junta de Andalucía, a llevar a cabo una bonificación progresiva de este impuesto hasta llegar a un 99% de bonificación, para acabar con una desigualdad y una discriminación que convierte a los andaluces en españoles de segunda, frente a los residentes en autonomías en las que no existe este impuesto. Así como a impulsar, una vez modificado este impuesto, el retorno del éxodo fiscal.