Los rocieros nazarenos y quinteños ya están todos en la ciudad. El pasado miércoles por la tarde hacía la entrada en su barrio la Hermandad de Montequinto, con algunos cambios respectos a ediciones pasadas, ya que la comitiva sesteó en el entorno de la Ermita de la Alegría para hacer su presentación por la tarde en la parroquia de San Juan Pablo II antes de su proseguir su marcha hasta la entrada.
La Hermandad de Dos Hermanas hacía su entrada en la ciudad un día después, el jueves, y se hizo de esperar ante el concurrido público que se repartía por el itinerario que debía tomar la comitiva. Con dos horas de retraso sobre el horario previsto, la hermandad entró por Las Portadas y buscó la Parroquia del Rocío, antes de acceder al centro.