El 25 por ciento de la población española sufre estreñimiento, siendo más frecuente entre las mujeres
¿Qué es el estreñimiento?
Es un síntoma que se define por tener menos de tres deposiciones a la semana, acompañado de esfuerzo físico para realizar la evacuación y/o heces de consistencia dura, y sensación de “estar lleno”, tener el abdomen distendido con dolor generalizado o tener el intestino ocupado. Cuando estos síntomas aparecen de forma esporádica (durante un viaje, un cambio de horario en las comidas o en el trabajo, o una situación de estrés) hablamos de estreñimiento agudo. Cuando ocurre de forma habitual, se denomina estreñimiento crónico.
¿Qué causa este estreñimiento?
Existen múltiples causas: una dieta pobre en fibras, la falta de actividad física, no tomar agua suficiente, demorar ir al baño cuando se tiene el impulso de defecar, el estrés o el viajar. También determinadas enfermedades intestinales como el síndrome del intestino irritable, la falta de tono muscular o el engrosamiento de la pared intestinal, o el cáncer de colon. Pueden producir estreñimiento algunas enfermedades mentales, trastornos del sistema nervioso, el hipotiroidismo, ciertos medicamentos, el envejecimiento o el embarazo. Hablamos de estreñimiento idiopático cuando se desconoce la causa que lo ha originado.
{xtypo_rounded4}Fibra Y AGUA
son claves para la prevención{/xtypo_rounded4}
¿Cuándo debemos acudir al médico?
Cuando se trate de un estreñimiento crónico, haya presencia de sangre en las heces, existan cambios de hábitos intestinales (diarreas y estreñimiento) o aparezca dolor rectal.
¿Cómo tratar este estreñimiento?
Se aconseja realizar un cambio de nuestros hábitos dietéticos, aumentando el consumo de frutas y verduras (con cáscara siempre que sea posible), consumir productos integrales y no refinados. Las legumbres y los frutos secos en cantidad moderada son también una buena fuente de fibras. Se debe aumentar la ingesta de líquido, fundamentalmente agua, hacer ejercicio físico regularmente, ir al servicio cuando se tiene el impulso de defecar, aprovechar también las horas en que el intestino es más activo (después del desayuno y después de las comidas) y evitar situaciones de estrés. Si a pesar de estas medidas el estreñimiento persiste debemos acudir a nuestro médico para iniciar un tratamiento farmacológico que en la mayoría de los casos serán productos naturales que han de tomarse bajo supervisión médica.
{xtypo_rounded3}Cinco consejos básicos
1 Realizar una dieta rica en fibra: frutas, verduras y legumbres.
2 Incrementar la ingesta de agua: ingerir de 2 a 3 litros diarios.
3 Realizar ejercicio físico de forma regular y moderada: caminar una hora diaria.
4 No tomar medicamentos que agraven el estreñimiento: evitar derivados opiáceos.
5 Modificar los hábitos intestinales: crear una disciplina horaria e ir al baño si existe el impulso.{/xtypo_rounded3}
