La Virgen del Pilar procesionó por Montequinto acortando recorrido y tiempo en la calle
La inestabilidad atmosférica ha marcado el devenir del puente en el que la Agrupación de la Humildad ha celebrado sus cultos en torno a su titular, la Virgen del Pilar en su Mayor Dolor, que culminaron el pasado lunes con su procesión por las calles de Montequinto.
Las previsiones apuntaban lluvias para la noche, por lo que la agrupación decidió salir, acortando dentro de lo posible el tiempo que la Dolorosa estuviese en la calle, evitando parte de su recorrido.
La Virgen ofreció una estampa atípica en Montequinto, que vivía una de sus primeras procesiones por la calle. Con un manto azul, como su saya, y con un exorno de flores blancas, la dolorosa se paseó por su barrio sobre el paso de la Virgen de la Candelaria de Sevilla, cuya marcha, interpretada por la Banda de Santa Ana la recibieron a la salida.
La Virgen del Pilar estuvo acompañada en todo momento por numerosos fieles y devotos.