La Rociera cae por 3-1 ante el Conil CF y se complica la salvación a tres jornadas del final de liga
La Rociera se complica aún más su permanencia en 3ª División al caer por 3-1 ante el Conil CF en un partido en el que los nazarenos salieron con ganas pero en el que cada gol encajado fue un jarro de agua de fría, cada uno mayor que el anterior, para el conjunto auriazul.
Pese a los intentos, la gran ocasión de la primera parte la protagonizó Aguilera, que marcó el primero gol de los gaditanos en el minuto 35. Este duro revés para los nazarenos trató de enmendarlo Villalón, que fue el que más cerca estuvo de poner en tablas una contienda a la que le aún le quedaba lo peor por llegar.
Y así fue, puesto que el Conil, no satisfecho con la ventaja mínima cosechada a diez minutos del descanso, apuntilló al cuadro nazareno, que apenas pudo rascar un tanto a favor en el tramo final del partido.
La Rociera puso toda la carne en el asador tras el descanso pero poco a poco se fue diluyendo como una vela que ya no tiene más pabilo para arder.
Con un equipo de capa caída, el extremo Mario se encargó de batir al portero Rivas en el minuto 50. No hubo que esperar mucho, ya que en el minuto 56 Aguilera, autor del tanto de la primera parte, marcó el tercero para el conjunto local.
Tras este gol la Rociera optó por efectuar una serie de cambios que a la postre se mostraron efectivos para la racha del equipo: Resumi por Rubén, Hinojos (máximo anotador del filial) por Villalón y Sol por Fran Ruiz. Precisamente fue Hinojos el encargado de sortear al meta Trinquete y acortar distancias en el minuto 80.
Con este resultado el equipo nazareno se complica mucho su permanencia en 3ª División, aunque la esperanza aún se mantiene viva hasta el último instante. La continuidad del club auriazul depende mucho de que el Arcos pierda ante el Sevilla C, ya salvado. Para colmo, la Rociera recibe este domingo a las 12:00 horas en el Miguel Román nada menos que al líder, el Algeciras. Un hueso duro de roer. Tras este auténtico entuerto vendrá el partido en el feudo del Guadalcacín y el choque en casa ante el Écija.