La Guardia Civil, que hace unos días se vio obligada a desalojar de la finca “El Copero” a 85 obreros que segaban habas sin permiso del dueño, estableció anoche dos coches de asalto en servicio de vigilancia por las calles de Dos Hermanas.
Primero se declararon en huelga los vendedores de abastos, después se sumaron los repartidores de pan y carbón a domicilio y finalmente han sido los obreros de los almacenes de aceitunas los que se han establecido en “huelga de brazos caídos” para pedir mejoras en los jornales. Ante la presencia de los guardias de asalto, los obreros se vieron obligados anoche a desalojar las fábricas.