Empate ante el Cerro en un partido en el que los de Leal le dieron la vuelta al marcador
El Dos Hermanas progresa adecuadamente. Cuando parecía que el histórico club nazareno lo había dado todo por perdido, ha sacado fuerzas de flaqueza y se está sobreponiendo a ese mal llamado descenso. Venció la pasada semana y a punto estuvo de hacerlo ésta ante el Cerro, de no haber encajado un gol de empate en el minuto 90, finalizando con un 3-3.
Aunque si una proeza fue cerrar el partido puntuando, mayor es aún la gesta si el arranque del partido fue de todo menos bueno para los pupilos de Paco Leal. La primera mitad, de hecho, fue propiedad absoluta de los anfitriones hispalenses. En el minuto 15 el mediocentro Roldán materializó el primer gol.
El 1-0 en contra animó a los visitantes a estirar líneas y a reforzar la defensa. La barrera se tornó impenetrable pero el gol se hacía de rogar. Así hasta el descanso.
El arranque del segundo tiempo fue una prolongación de lo visto al final del primero. La actitud conservadora del Dos Hermanas propició que en un contragolpe (minuto 58) José le regalara al Cerro su segundo tanto.
Con dos goles encajados y con apenas media hora de partido por delante, los de Leal se apretaron los machos y se volcaron descaradamente en el ataque, encerrando así al equipo de Hytasa. Un Melquiades tocado de gracia acortó distancias en el 62, empatando en el 80.
Con el partido al rojo vivo, el nazareno Álvarez rompió la igualdad y adelantó al Dos Hermanas en el 86, aunque en el 90 Sergio Hurtado lo dejó en tablas para el Cerro. Los rojiazules rozaron la gloria. Tratarán de tocarla esta semana en San José.
