Ha estado financiado por el Ministerio de Defensa
Manuel Díaz Ordóñez, historiador y escritor catalán, afincado en Montequinto, acaba de publicar un nuevo libro. Amarrados al negocio. Reformismo Borbónico y suministro de jarcia a la Armada Real (1675-1751) es producto de su tesis doctoral de la Universidad de Barcelona (2006) con la que obtuvo el Premio Nacional Virgen del Carmen de la Armada Española (2007).
Un material documental que despertó la curiosidad del Ministerio de Defensa, tras el premio, quien se ha encargado de financiar el libro, una síntexis de la tesis, llevada, según su autor, “a una lectura más ciudadana”.
El trabajo de investigación de Manuel Díaz Ordóñez sitúa el sistema de suministro de jarcia para la Armada Real desde 1675 a 1751. Para ello, ha analizado el desarrollo de la cordelería y su aplicación específica en la construción naval, centrándose en la gran importancia que este producto tenía como elemento primordial de la navegación.
Entre las principales conclusiones que despeja este libro destaca el hecho de que el cáñamo acabó desplazando al esparto como materia prima básica de la jarcia durante el siglo XVI; se constata el enorme esfuerzo reformista Borbónico en el fomento del cultivo de esta fibra en la península y en ultramar; los arsenales militares españoles y las industrias que contenían se convirtieron por primera vez en industrias concentradas de cariz netamente moderno; la elección de los asientos por parte de la Corona en el período estudiado como única alternativa al suministro de jarcia por los imperativos de la coyuntura económica, técnica y humana en torno a la manufactura de este producto; se analiza en profundidad el intervencionismo del reformismo borbónico en los contratos con particulares, inclinando decididamente su contenido hacia el interés de la Corona en clara oposición con la tradición asentista de la anterior dinastía; los asientos se convirtieron en un eficaz marco de intercambio de intereses entre la administración y los contratistas donde cada uno consiguió lo que esperaba de la otra parte; y miembros destacados de la burguesía catalana obtuvieron de este tipo de contratos un eficaz marco de acción para desarrollar sus actividades comerciales y financieras con el cobijo de la colaboración con la Corona española.
Manuel Díaz ya trabaja en la segunda parte de esta investigación, el periodo que abarca desde 1751 a 1805, del que ya ofreció un adelanto en una conferencia en la universidad Pablo Olavide.