“Estoy muy contento por torear en Dos Hermanas, aunque haya sido tan tarde”
Ni el fútbol, ni el tenis ni la natación lograron persuadir a Antonio Nazaré de su pasión por los toros. “Yo quería ser torero y no era una fiebre pasajera”. Y a la vista están los resultados. A sus 23 años, Nazaré es un novillero con muchas miras de futuro, después de superar el pasado año con 12 novilladas, siete de ellas en plazas de primera. Ahora recala, al fin, aunque nunca es tarde, en Dos Hermanas, su ciudad, toreando en los festejos taurinos de la feria de su pueblo. Para quitarse esa espinita que tiene clavada, Antonio espera disfrutar y hacer disfrutar a los asistentes de una buena tarde de toros. Será el viernes de feria.
Cuénteme el momento en el que Antonio Nazaré niño anuncia a sus padres que quiere ser torero.
Tenía ocho años y me gustaba sentarme con mi padre a ver los toros por la televisión. Había algo que me atraía y que no me pasaba ni con el fútbol, el tenis o la natación. Yo quería ser torero y mis padres pensaban que era una fiebre pasajera, como me había ocurrido con esos deportes, pero no fue así. Decidieron apuntarme a la escuela de toros de Alcalá de Guadaíra y allí estuve hasta los 15 años.
¿Son difíciles los inicios de un matador de toros?
Bastante. Me lo han puesto muy difícil. Debuté con caballos con 15 años y durante cuatro años estuve sin poder torear por temas económicos. Gracias a mi actual apoderado, Emilio Moreno, han mejorado muchos las cosas.
¿Cómo llega a la vida de Emilio Moreno o como llega él a la suya?
Fue en un tentadero en el campo, en el que acompañaba al torero Fernando Rodeño, apoderado por Moreno. Allí toreé y le gustó. Desde que me apoderó he toreado 19 corridas, 12 de ellas el pasado año 2007, siete de las cuales fueron en plazas de primera, como Sevilla, Madrid o el Puerto de Santa María y en todas he cortado orejas. Estoy muy contento a pesar de que hay muchos sitios en los que te piden dinero por torear y hay ponedores dispuestos a pagarlo, pero nosotros no.
Y este año al fin torea en su ciudad…
Sí y estoy muy contento, aunque he tardado en poder torear en mi pueblo y no me tires de la lengua, porque estoy muy ilusionado de poder estar en Dos Hermanas con mi gente, que siempre ha estado ahí conmigo.
Defíname el cartel con el que va a debutar en los festejos taurinos de la Feria de Dos Hermanas.
El cartel es bonito y atractivo, ya que hay un rejoneador, un matador de toros y un novillero con caballos. Hay un poco de todo.
Este es el cartel real, pero ¿con qué cartel le hubiese gustado estrenarse en su pueblo? ¿Con qué toreros le gustaría compartir plaza?
Son muchos. Por ejemplo, José Tomás, Morante de la Puebla, El Cid o El Juli, que es mi favorito.
¿Cree que cuenta con el apoyo de los nazarenos?
No es que el público te apoye o no, es que a los políticos de Dos Hermanas parece que no le gustan los toros y ahí se refleja el poco apoyo. Si en Dos Hermanas hubiera una plaza o una escuela de tauromaquia, sí se apoyaría al toreo.
¿Le gustaría que Dos Hermanas tuviera una plaza propia?
Me gustaría que la ciudad tuviera su plaza de material y así no tendría que montarse una todos los años y tener que torear en una plaza prefabricada.
¿Su familia y amigos le apoyan en esta dura carrera?
Mi familia está conmigo a muerte, siempre ha estado ahí y me acompaña a todos los sitios.
¿Puede vivir un novillero de lo que realmente le gusta?
Es difícil vivir de los toros, pero seguimos adelante. Ahora mismo estoy muy centrado en los toros, no trabajo en otros asuntos, ya que un torero no puede llevar dos cosas a la vez, necesita concentración y cuando no estoy toreando me concentro y entreno en una finca de Cádiz o Salamanca.
¿Tomar la alternativa es algo que esté en sus planes a corto o medio plazo?
Uno siempre piensa en eso, pero no es algo que aún esté cerrado y voy a luchar por ello. De tomarla, me gustaría que fuera en la plaza de la Maestranza de Sevilla. Es un buen sitio.