Ana Casado Perea, de 40 años de edad y ama de casa, es socia del Ibarburu y colaboradora de su marido, entrenador del equipo de Juveniles del club. Ahora le ha llegado un momento crucial, ya que ha dado el sí a la posibilidad que le pusieron sobre la mesa recientemente: convertirse en la presidenta de la entidad.
Es usted la primera mujer presidente en el fútbol nazareno…
Llevo acompañando siempre a mi marido Antonio Calle, desde que entrenaba en la UD Juan Velasco y en el Ibarburu Juvenil. Es para mí un gran honor que como socia de este equipo los directivos que han quedado hablaran conmigo, y yo acepté.
¿Conoce el alcance de convertirse en presidenta ?
Aunque soy ama de casa, siempre encuentro un hueco para todo. Mi hijo juega al fútbol, mi marido es entrenador… qué mejor que sea presidenta de este club, y además, para alentar a las mujeres, que también deben integrarse en el fútbol. En 1ª y 2ª División también hay presidentas.
Un objetivo inicial será la renovación en lo deportivo y social…
Cuento con seis directivos de la anterior junta más seis que se han agregado. Con estos es suficiente, aunque si vienen más no hay problema. En lo deportivo, vamos a firmar con un nuevo entrenador y hablaremos con los jugadores. Cuento con un secretario técnico como es Santos, un hombre con mucho conocimiento sobre el fútbol nazareno.
¿Conseguirá más recursos para el club?
Tengo casi terminada la junta directiva, pero dentro de ella hay personas de mucha confianza, que han estado durante muchos años en el Ibarburu, que llevarán el tema económico y deportivo. Ustedes saben quiénes son.
¿Y sobre los socios de la entidad?
Debemos trabajar muy bien en este apartado. Siempre hemos tenido una masa social muy buena y fiel.
"Las mujeres deben integrarse también en el mundo del fútbol”
