La decisión

0
- Publicidad -

(Marcos 1,12-15) DESPUES de dos años preparándome para el bautismo, cuando faltan sólo unos días para la Vigilia Pascual en la que me consagraré como cristiano, me decís que me lo piense de nuevo; que vuelva a meditar seriamente si estoy preparado para bautizarme…

Yo no entiendo la iglesia como el grupo de los perfectos, así que mis pecados y limitaciones no me asustan. Si fuera así hace tiempo que habría dejado las catequesis de adultos. Pero si mi vida como cristiano es tan falsa y superficial como la de muchos que se bautizaron e hicieron la comunión de pequeños, y se casaron por la Iglesia para nada… mejor me quedo sin bautizar y, por lo menos, seré un poco más coherente y sincero.

(…) Lo siento, ya estoy otra vez juzgando a los demás, y sólo Dios sabe lo que hay en el corazón de cada persona.

- Publicidad -

(…) No sé si con el tiempo llegaré a vivir un cristianismo acomodado y superficial. Pero, ahora mismo, sé que sin Cristo mi vida no llegará nunca a ser clara, ni transparente. Sólo en Él puedo confiar, porque siendo como nosotros en todo, estaba tan volcado en el amor que en su corazón no cabía pecado. En él yo no veo un hombre perfecto; quizás hubo algún momento en el que se equivocó, eso no me importa; creo que siempre miró a todos a los ojos, como quiero que me mire a mí.
Hubo un tiempo en el que creía que Él me acompañaba en mi vida. Ahora sé que lo que quiere es que yo lo siga. Y eso me da miedo: ¿seré capaz de compadecerme de los pobres como Él?, ¿podré enfrentarme con la injusticia y el odio como Él?, ¿tendré la constancia de entregarle al Padre cada día mi vida como hizo Él?

 

- Publicidad -

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí
Captcha verification failed!
La puntuación de usuario de captcha falló. ¡por favor contáctenos!