´El corazón en paz ve una fiesta en todas las aldeas”. Así reza un proverbio hindú que bien hubiera resumido el partido de este pasado domingo entre el Arcos CF y la PD Rociera, una fiesta, la del fútbol, enmarcada entre los fastos feriales de la localidad gaditana, celebrados hasta este fin de semana. Así tendría que haber sido de no haber mediado los estragos del desfase, que convirtieron la fiesta en una batalla hostil, que se resolvió en tablas con un 2-2.
No tuvieron culpa de ello los jugadores locales. Todo vino de la mano de los pocos seguidores del equipo arcense que se pasaron por su estadio tras haberlo hecho previamente por la feria local de San Miguel.
Otra explicación no cuadra para comprender la pitada con la que fue recibida la comitiva auriazul -con cerveza incluida arrojada sobre el técnico del conjunto, Miguel Ángel Cáceres- así como la supuesta agresión que recibió en el banquillo el meta suplente Álex, hecho que el club de la barriada de El Rocío pretende denunicar ante la Guardia Civil, grabación en mano.
Pese a la hostilidad del ambiente, los nazarenos supieron concentrarse y saltar al terreno con la intención de entregarse por completo. Pocas cosas reseñables se vieron durante buena parte del primer tiempo, en el que la Rociera se esforzó principalmente en atajar las llegadas de Zúñiga, el efectivo más peligroso del cuadro arcense.
Casi en los estertores de la primera mitad la maquinaria goleadora del conjunto nazareno se puso en marcha para abrir la cuenta de goles. Así, en el minuto 42, Gordi, desde fuera del área, encendió el luminoso para la Rociera con un tiro de falta.
Poco le duró la alegría a los pupilos de Cáceres, ya que en el descuento, en el 47, una falta absurda cometida por los nazarenos propició que los anfitriones igualaran la contienda por mediación de Pedro Herrera. En tela de juicio queda la legalidad de este tanto, debido a la posición irreglamentaria de dos jugadores del Arcos que el colegiado pareció no ver.
Crece la tensión
El descanso trajo un juego más equilibrado en el segundo tiempo entre ambos contrincantes y un creciente papel del Arcos dentro del partido, del que se convirtió en amo y señor. Su notorio papel no se correspondió, no obstante, en una abrumadora cuenta de goles, para alivio de los ‘rocieros’.
Con un rival crecido frente a sí, a la Rociera lo único que le quedaba por tener en contra era el público y al árbitro. Como si de una maldición se tratara, todo pareció fraguarse para que así fuera.
De este modo, en el minuto 73, el nazareno Alfonso fue objeto de una falta fuera del área pequeña por parte de un delantero arcense, acción que no fue amonestada por el trencilla. Instantes después, una disputa por el esférico entre dos contrarios se saldó con la caída de ambos y con el consiguiente ‘regalo’ de manos del árbitro, que pita penalti a favor del Arcos, que lanza y yerra Zúñiga al dar el balón en el poste.
La intromisión arbitral no se ciñó tan sólo a esta última acción. De nuevo Alfonso salió escaldado de la mano del colegiado al ser expulsado tras su non nato penalti.
Así, con una Rociera en inferioridad numérica desde el minuto 85, el Arcos inició su ofensiva por tratar de ampliar distancia en el marcador respecto a los auriazules. El ansiado tanto de la superioridad llegó con un contragolpe y una cadena de errores de los nazarenos que, con un resbalón del defensa Lorca, pone en bandeja el esférico a Jesús Barrera, que consigue batir sin problemas al portero Rivas.
Pese a ir por delante, el clima de hostilidad de la grada arcense fue in crescendo. Llegó entonces la citada agresión al meta suplente Álex, que se saldó con la expulsión de este, quien justificó que actuaba en defensa propia y trataba de repeler la agresión.
Los tres puntos parecían quedarse sin remisión en el bolsillo del Arcos cuando, en un último esfuerzo, ya en el agónico minuto 96, el nazareno José Romero se saca de la manga un gran regate con el que noquea a la muralla local y le coloca a Chiqui Carmona un balón con destino a la portería defendida por Bocardo, quedando resuelto el partido en tablas (2-2) y con reparto igualitario de puntos.
Tras este encontronazo, la Rociera recibe al Antoniano este domingo a las 18:00 horas en el Miguel Román.
{xtypo_code}No se traslada nuestro corazón
DESDE LA PLANTILLA de la PD Rociera queremos transmitir lo orgullosos que estamos de nuestros aficionados. La pasada temporada llenábamos nuestro campo y éramos el equipo que más aficionados llevaba tras su estela. Así quedó demostrado en San José de la Rinconada, Castilleja o Brenes, en ‘La Gran Marcha Amarillla’ hacia el estadio Miguel Román o en las más de 400 personas que nos arroparon en Arcos de la Frontera, sin olvidar los llenos históricos en nuestro campo Manuel Adame Bruña ante el Real Betis C, el Dos Hermanas CF o la vuelta de la fase de ascenso ante el Arcos CF.
Este año las circunstancias nos obligan al abandono de nuestro campo, pero sabemos que vosotros no nos abandonareis, que los horarios cambiarán según la ocupación del estadio Miguel Román, pero que, aun así, volveremos a sentir vuestro apoyo, porque cada uno de vosotros sois muy importantes para nosotros. Sabéis que no somos jugadores retribuidos económicamente, pero nuestra retribución es vuestra asistencia a nuestros encuentros y vuestro apoyo incondicional. Porque se traslada nuestro físico, pero no nuestro corazón. Gracias a todos por animarnos cada jornada.{/xtypo_code}