Las nubes y los claros acompañan a Pasión en su estación de penitencia
La pugna estuvo complicada pero, finalmente, tanto el sol como las nubes se hicieron un hueco entre la bulla que esperaba en la puerta de la parroquia de Las Portadas para ver la salida de la cofradía de Pasión. Un barrio que resurge cada Martes Santo para hacerse hermandad y realizar su personal estación de penitencia. Es mucha la devoción que despiertan los titulares de esta corporación dentro y fuera de las fronteras de su barrio. Algo más que evidente con sólo escuchar las palabras de aliento y los vivas espontáneos que sus vecinos daban a los costaleros de ambos cuadrillas a la salida de la cofradía.
Con túnica burdeos y sobre un monte de iris morados con algunos toques de rosas rojas comenzó su caminar el Cristo de Pasión. Una larga chicotá desde el patio interior de la parroquia, amenizado con los sones de la agrupación musical Nuestra Señora de Valme, que acompañó al primero de los pasos hasta adentrarse en el corazón de su barrio.
Con corona de reina, una de las imágenes más esperadas de la jornada, ya que hacía varios Martes Santos que no la lucía, la Virgen del Amparo se presentaba ayer ante sus fieles. Los sones trianeros de la marcha Esperanza de Triana Coronada, arroparon a la Dolorosa en su salida desde el interior de la parroquia.
Más bella que nunca o así lo expresaban sus vecinos de Las Portadas, la Virgen llevaba este Martes Santo un doble puñal de dolor clavado en su corazón: el de la Pasión y un pañuelo negro, así como un lazo de la misma tonalidad en su varal, como muestra de luto por el fallecimiento de su fundador, el sacerdote José Luis Pabón Solís.
La Virgen del Amparo se fue perdiendo entre las calles estrechas de su barriada, mientras los fieles allí congregados levantaban la vista al cielo, temerosos de que las nubes curiosas y cofrades se tornasen en lluvia. “No da agua para hoy”, afirmaba una de las vecinas. “Agua la justa, para beber”, le contestaba rotundo otro vecino. “Que llueva a partir de las 5:00 de la madrugada”.
Entre nubes y claros, al cierre de esta edición, la cofradía de Las Portadas se adentraba en el casco antiguo de la ciudad para presentarse ante Santa María Magdalena.
Nubes y claros
El tiempo para la segunda mitad de la Semana Santa se mantiene estable. Nubes y claros con escasas probabilidades de lluvia.