Holanda en Inter-Rail

0
- Publicidad -
viajes

Un pequeño país bajo el nivel del mar

FICHA TÉCNICA DEL VIAJE
Curiosidades: Toda persona mayor de 18 años puede comprar hasta 5 gramos de marihuana o hachís en los lugares llamados “ Coffee shop “, que se hallan bajo el control legal e impositivo del gobierno holandés.
Religión: católicos 31%, Iglesia Reformada Holandesa 14%, calvinistas 8%, musulmanes 3,9%, otros 4,1%, no profesan 39%. 
Idiomas: holandés (oficial); frisón y sajón; turco, árabe, kurdo y de otras comunidades inmigrantes.
Capital: Ámsterdam. Aunque el gobierno reside en La Haya, Amsterdam  conserva el carácter oficial de capital del país.
 

viajesHay un refrán holandés que dice: Holanda es de los holandeses, y nunca mejor dicho. Este país (Países Bajos) con los años ha ido ganando terreno al mar y construyendo grandes diques para que sus tierras queden protegidas contra la furia del mar.

- Publicidad -

Holanda es un minúsculo país que junto con Bélgica y Luxemburgo forman lo que es el BENELUX, situado a caballo entre los países nórdicos y Europa central, su gente, quizás de los más liberales de toda Europa: cultos a rabiar y con una gran tolerancia hacia todas las culturas, religiones y razas. En este país una gran parte de su población son emigrantes (muchos españoles que encontraron allí trabajo en los años 60 y 70 ).
Aunque el nombre real es Países bajos, es más conocido como Holanda, siendo éste realmente el nombre de una de las regiones en las que divide el país.

Conocido mundialmente por sus canales, campos de tulipanes, molinos de viento, bicicletas, tranvías, luces rojas, sexo tras los escaparates, y la legalización del consumo de  droga. La combinación entre todos estos ingredientes hace que este país sea uno de los más visitado de Europa.

Fácil de recorrer por sus dimensiones reducidas, y con una infinidad de atractivos, me dispuse a recorrerlo junto con otros tantos países europeos en Inter-Rail.

El  Inter-Rail es un billete que te da derecho a coger todos los trenes "normales" en el área de validez del mismo. Hay distintas modalidades de inter-Rail (con distintos precios) dependiendo de la edad que tengas a la hora de salir. Como es un billete de tren, se compra en cualquier taquilla de Renfe y en muchas agencias de viaje.
El billete te da la libertad de escoger el itinerario que deseas hacer. En principio es conveniente prefijar un cierto itinerario base y, en función de lo que nos vayamos encontrando, variarlo a nuestro antojo.
Inter-Rail es sinónimo de libertad. Podremos elegir nuestro destino entre un montón de opciones, quedarnos el tiempo que queramos en la ciudad que nos guste, o salir si no queremos ver nada más. No estamos sujetos a ningún plan preestablecido por ninguna agencia, que siempre te obliga un poco a someterte a lo que pone en un folleto. Por supuesto, tampoco te está esperando un autocar a la llegada a la estación o al aeropuerto, y tampoco se encarga nadie de los billetes, o de las entradas para tal o cual sitio, de modo que todo depende un poco del espíritu viajero de cada uno. Evidentemente, yo prefiero elegir lo que hago con mi tiempo.
Durante 10 días recorrí las ciudades de Ámsterdam, Rótterdam, y Groninga. Acompañado solo por mi mochila, saco de dormir y un gran entusiasmo por conocer este mundo. Conviví con alemanes, vascos, holandeses e ingleses, y todos ellos conocidos en los distintos albergues y ‘sleepin’ (grandes locales donde necesitas el saco de dormir para pernoctar) repartidos por el país.

Mi primer destino fue Ámsterdam, conocida como la Venecia del norte, ya de pequeño soñaba con conocerla. Es una ciudad mágica de noche y hermosa de día. Esta ciudad combina sus amplios canales y numerosos puentes con la original arquitectura de los siglos XVI y XVII. Pasear por sus calles, donde cientos de bicicletas salen a tu encuentro es una gozada para el viajero. Los puentecillos atraviesan los canales, algunos cortos otros largos, estrechos, anchos, pero siempre de una innegable belleza. En los márgenes de las orillas, son muchos los barquitos que se encuentran atracados y que utilizan como vivienda durante todo el año los holandeses.
Las obras de los famosos artistas como Rembramt y Van Gogh se pueden admirar en los muchos museos existentes como el célebre Rijksmuseum.

Cuando el día da paso a la noche, las calles del barrio chino cobran vida. Los puentes con sus luces rojas nos muestran el camino a seguir para adentrarnos en este inigualable mundo de la vida nocturna. Cada pocos metros los sex shop, sex film, salas de fiestas, de copas, de alterne y todo un mundo de placeres pecaminosos repartidos por todos sus rincones.

 Pero sin lugar a dudas lo más llamativo y curioso de este barrio es la presencia tras los escaparates de las mujeres que ejercen la profesión más antigua. Como si de unas maniquíes  se tratase, con poses llamativas intentan atraer a los potenciales clientes, 

- Publicidad -

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí
Captcha verification failed!
La puntuación de usuario de captcha falló. ¡por favor contáctenos!