Las nazarenas, que se dejaron ir de salida (3-6), acarician el empate ante un C.N. Sant Andreu (12-13) que acabó pidiendo la hora
El C.W. Dos Hermanas-Emasesa ha encajado una nueva derrota en la División de Honor femenina de waterpolo, en este caso por la mínima (12-13) ante el C.N. Sant Andreu. El equipo catalán, tercer clasificado el pasado curso, ha aprovechado de la candidez nazarena en el arranque para escaparse en el marcador de forma decisiva (3-6 al final del primer cuarto y 6-10 al descanso).
La segunda comparecencia como local del equipo sevillano ha dejado el agridulce sabor de ver cómo tiene capacidad para plantar cara a uno de los gallitos de la máxima categoría nacional, ante el que un mal inicio y el riguroso criterio arbitral dejaba sin recompensa.
A punto estuvieron las chicas de Javier Cortés, castigadas a la contra en el primer cuarto, de sumar el que hubiera sido su primer punto de la temporada en el Centro Acuático del barrio de Montequinto. El larguero lo impedía a falta de 10 segundos para la conclusión tras repeler el lanzamiento en la doble boya de la cubana Lisandra Frómeta, previamente tocado por la guardameta barcelonesa.
La reprimenda del técnico local a sus jugadoras dio el resultado esperado. Lorena Miranda asumió sus galones para liderar la reacción de un Dos Hermanas que recortaba distancias en el tercer acto tras un 3-1 de parcial que invitaba a soñar a la animosa grada (9-11).
En el último cuarto, a pesar de golpear primero el Sant Andreu, que cogía oxígeno con el 9-12, las nazarenas estrecharon el marcador hasta rozar el empate, que finalmente no llegó.
