Hubo un parón en la calle Real cuando unos maceteros se engancharon a la carroza de los cuentos.
El cortejo de SS.MM. los Reyes Magos de Oriente recorrió las calles nazarenas con un despliegue de luz, música y colorido. La tarde noche del 5 de enero, los magos se emplearon a fondo para llegar a tiempo a todas las casas de los niños de Dos Hermanas, aunque antes repartieron su estela de ilusión, acompañados por pajes, beduinos y músicos que pusieron un toque más de alegría.
Tras su presentación en Huerta Palacios, Melchor, Gaspar y Baltasar, acompañados por la Estrella de la Ilusión y el Cartero Real, visitaron a los abuelos de la residencia San Rafael, que recibieron emocionados sus regalos. De ahí partieron en coches de caballos hacia la calle Arroz, donde los esperaban las carrozas, dedicadas este año, con gran acierto, al tema único de los regalos.
Nuevo recorrido
C
arrozas coloristas, repletas de niños y niñas sonrientes, cruzaron Dos Hermanas casi de punta a punta en un recorrido que podía parecer demasiado largo, aunque según la Asociación Pro Cabalgata, los horarios se cumplieron de forma rigurosa y el nuevo recorrido ha sido muy bien aceptado por los nazarenos, ya que de esta forma se da la oportunidad a la población de ver la cabalgata en más sitios y se intentan evitar aglomeraciones.
Sin embargo, siempre hay puntos señeros en los que los nazarenos no quieren perderse la cabalgata de Reyes. La plazoleta de la Virgen de Valme y Los Jardines volvieron a ser los lugares de mayor afluencia.
Sin incidentes destacados
Con la fluidez que se esperaba discurrió la cabalgata, aunque con un parón importante a la altura de la calle Real, cuando la carroza dedicada a los libros de cuentos se enganchó en algunos de los macetones altos que adornan la calle. El problema se solucionó cortando las ramas de los árboles que sobresalían de la carroza y la comitiva impuso un ritmo más rápido para recuperar el tiempo que se había perdido.
Asimismo, hubo algunas incidencias con las ropas de los Reyes Magos, ya que se estrenaban complementos este año, como las coronas, que no se ajustaban bien a los representantes reales.
Aun así, la cabalgata discurrió con normalidad, ante cientos de nazarenos que salieron a la calle a admirar el trabajo artesanal de las carrozas.



























