La expropiación de Lugar Nuevo cubrirá las necesidades empresariales hasta dentro de diez años
Nunca se había firmado un convenio urbanístico de estas características. Con estas palabras definió José Manuel Carrión, concejal de Urbanismo, el acuerdo alcanzado hace una semana con la familia Nogueras por el que las siete sociedades que la conforman ceden al Ayuntamiento los derechos dominicales de una superficie de terrenos aproximada de 2.632.900 metros cuadrados(entre la variante de la N-IV y las carreteras SE-685 y SE-687)con 1.421.218 de parcela urbanizable de la que los Nogueras se llevan 355.293 a repartir entre los siete hermanos.
El Ayuntamiento se reserva el cien por cien del Parque Comercial cuyo desarrollo urbanístico será definido en el Plan Parcial de Ordenación según lo previsto en el segundo PGOU, definiéndose los usos, tipologías y características. Su gestión y coordinación se realizarán en la forma que la Corporación Municipal estime más adecuada bien directamente a través del propio consistorio o la Sociedad de Desarrollo Económico Municipal o indirectamente, mediante el correspondiente concurso público
Por su parte las sociedades participantes finalizarán los trámites hasta la ejecución del derecho de reversión cuyo pago será asumido por ellos y por SEPES en la forma que corresponda, colaborando el Ayuntamiento en las gestiones que se realicen para ultimar la reversión. Además, cada parte firmante asume el compromiso de efectuar las gestiones oportunas y precisas para el desalojo de los precaristas que ocupan los terrenos. Asimismo este convenio supone la suspensión de los recursos contenciosos administrativos en trámite.
Según el concejal de Urbanismo, con esta nueva cartera de suelo “se cubren las necesidades de empresas de todo tipo hasta dentro de ocho o diez años”; aunque sin dejar de lado, aportó el portavoz, Agustín Morón, “el resto de iniciativas emprendidas hasta la fecha para el desarrollo industrial de la ciudad”, como la prevista en su momento en la zona de Arco Norte ante la paralización del proceso de ampliación de La Isla.
El camino de la expropiación no ha sido nada fácil,desde los problemas para el establecimiento del precio del suelo, hasta la invalidación por parte del TSJA del proceso de expropiación. Una decisión que llevó al alcalde a dar un ultimátum a la familia Nogueras con que si no se expropiaban los terrenos se recalificarían como agrícolas y se buscarían nuevas opciones. Con esta firma el Polígono La Isla se convertirá en una de las superficies industriales más grandes de Andalucía.
Un proceso iniciado en el año 2000
El proceso de expropiación de estos terrenos se inició por acuerdo plenario el día 20 julio de 2000. La Sociedad Estatal de Promoción y Equipamiento del Suelo (Sepes) ya lo expropió en la década de los 60 para ejecutar el Canal de Bonanza y que no se llevó nunca a cabo. Por este motivo la familia exigió el derecho de reversión de los terrenos en un proceso que se alarga hasta la fecha
