Gracias…
Gracias por los momentos que hemos compartido.
Gracias por ser un buen esposo.
Gracias por ser un buen padre.
Gracias por ser tan amigo de tus amigos.
Gracias por haberte ofrecido cuando te necesitamos.
“Un millón de palabras no pueden hacer que vuelvas.
Lo sé, porque lo he intentado. Tampoco un millón de lágrimas.
Es muy difícil encontrar un buen amigo…
Más difícil todavía dejarlo e imposible olvidarlo.”
Estés donde estés, nuestros pensamientos siempre…estarán contigo.
¡Gracias José Luis, por mantenernos unidos!