- Publicidad -

La Parroquia de Santa María Magdalena ha acogido este domingo, día 10, a mediodía la Exaltación de la Navidad que organiza el Consejo de Hermandades y Cofradías de Dos Hermanas. En esta edición, esta exaltación ha corrido a cargo de Alberto Jiménez Pérez, hermano mayor de la Hermandad del Rocío de Montequinto, quien ha realizado una llamada a una Navidad más solidaria.

El acto ha estado presidido por el alcalde de la ciudad, Paco Rodríguez, el párroco de Santa María Magdalena, Manuel Sánchez de Heredia, y el presidente del Consejo, Fran Alba, contando con una representación de la corporación municipal y de hermanos y hermanas mayores de las hermandades de la ciudad.

La nota musical de esta exaltación navideña, con villancicos de corte tradicional, ha sido un mano a mano de dos coros con los que el exaltador mantiene una estrecha vinculación. Por una parte, el Coro del Inmaculado Corazón de María de Torreblanca, del que forma parte desde hace 34 años, y el Coro de la Hermandad del Rocío de Montequinto.

- Publicidad -

Julio Carpio Torres, un gran amigo de la infancia de Alberto Jiménez Pérez, ha sido el encargado de presentar al público presente en la parroquia al exaltador. Lo ha hecho desde diferentes versiones, diferentes partes de un prisma que, al juntarse, han dado forma a un todo, la personalidad de Alberto. Julio ha hablado desde la vertiente de la amistad que los unes, desde la familiar, la profesional y la que vincula a este sevillano de la barriada de Torreblanca con Dos Hermanas y Montequinto desde hace más de dos décadas.

Alberto comenzó su exaltación asegurando que, tras su designación, «no quise dejar pasar la oportunidad de pregonar la Navidad y, desde entonces, no he dejado de pedir ayuda a la Virgen del Rocío«. Y es que este quinteño adopción nunca pudo imaginar que un día «iba a estar en la Parroquia de Santa María Magdalena exaltando la Navidad de mi ciudad de adopción, con el privilegio de poder dirigirme a mis vecinas y vecinos».

El exaltador abogó por «mantener todo el año viva la llama de Jesús«, afirmando que lo que se celebra en estas fiestas, además de su llegada al mundo, es «triunfo de la luz sobre las tinieblas, por lo que es una celebración de la vida, del comienzo de la plenitud de los tiempos».

Aprovechando que la Navidad es una celebración de reuniones familiares, Alberto destacó lo importante que es «mantener esta tradición en la era digital«, poniendo en valor «el significado de familia y amistad, que tanto peso le dan a esta fiesta para evitar el aislamiento social» al que nos conduce el uso de los dispositivos móviles».

En un momento de la exaltación, el Jiménez Perez compartió con los presentes recuerdos y vivencias personales y familiares, antes de enfocar el verdadero sentido de esta fiesta: la ayuda a los que más lo necesitan. En esta llamada a una Navidad más solidaria, Alberto abogó por la necesidad de que el Belén se mantenga montado todo el año, como lo hace su Hermandad del Rocío de Montequinto con su programa Auxilium 365, que ayuda a las personas que más lo necesitan, o como hace el Centro de Orientación Familiar de la ciudad. Dos iniciativas que «mantienen todo el año viva la llama de la Navidad».

Antes de finalizar su exaltación, Alberto Jiménez Pérez hizo un ruego al Pastorcito Divino, «una reflexión final, para que los líderes políticos de todo el mundo dejen de lado las armas y dialoguen para que cesen la violencia y la muerte, y no se potencie el odio entre hermanos». Ese ha sido su deseeo de Navidad, que «la solidaridad se contagie durante todo el año».

Tras finalizar la Exaltación de la Navidad y recibir el aplauso del público, el presidente del Consejo de Hermandades y Cofradías, Fran Alba, le hizo entrega de una escultura que reproduce el misterio del nacimiento de Jesús.

- Publicidad -

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí
Captcha verification failed!
La puntuación de usuario de captcha falló. ¡por favor contáctenos!