Presidente de Cruz Roja
Nacido en Camas, pero residente en Dos Hermanas, Salvador Guzmán López siempre ha estado muy vinculado con los movimientos sociales. Una vez jubilado, en el año 2012, decide iniciarse en el mundo del voluntariado en Cruz Roja, donde ahora, a sus 69 años, asume su presidencia.
¿Qué le llevó a involucrarse con una entidad como Cruz Roja?
Decidí hacerme voluntario porque me parece una labor muy gratificante por ayudar a las personas que más lo necesitan y como estaba jubilado, decidí que era el momento para implicarme más.
¿Cuál va a ser su lema o filosofía de trabajo como nuevo presidente?
Estar más cerca de las personas y sacar a Cruz Roja a la calle con mesas informativas y actividades. Entre ellas, difundir entre las asociaciones y clubes sociales la labor que se realiza con las personas mayores, tanto de ocio como de acompañamiento y asesoramiento, con la intención de poder atender al mayor número de personas.
¿En qué proyectos va a volcar sus esfuerzos?
Los mayores van a ser una prioridad, como ya he indicado, así como la infancia, atendiendo a menores que se encuentren en riesgo de exclusión social con una atención integral. Sin olvidar el empleo, incidiendo en la formación, la intermediación social y la inserción laboral.
¿Qué cree que aporta a la organización como su nuevo presidente?
Humanidad, comprensión y ayuda porque he sido un hombre que siempre he trabajado en contacto directo con la gente.
{xtypo_quote}Estar más cerca de la gente y acercar Cruz Roja a la calle son mis objetivos{/xtypo_quote}
¿Y qué papel juega el voluntariado?
Es la piedra angular y sin ellos esta organización no sería nada. Son la estrella y nos dan lo más valioso que tienen, que es su tiempo y su disponibilidad. Actualmente tenemos en nómina 300 voluntarios, de los que 50 son los que realizan una labor más activa en diferentes programas.
¿Cuál es el modelo de financiación que tiene una organización como ésta?
Además de los asociados, que son el canal fundamental, contamos con convenios con el Ayuntamiento, como institución colaboradora con los poderes públicos, y con la venta de loterías y las cuestaciones públicas. Otros fondos nos llegan del IRPF y del Fondo Extraordinario de Ayuda a Personas Desfavorecidas, en este caso, en forma de alimentos. Estos dos últimos son auditados por el Gobierno Central.
¿Por qué momento pasa actualmente Cruz Roja Dos Hermanas?
Ahora goza de buena salud, con todos los proyectos en marcha y la maquinaria bien engrasada. La disposición del personal técnico y del voluntariado es excelente, además de contar con el apoyo de la organización provincial y del Ayuntamiento.
¿Está afectando de alguna forma la nueva ubicación de Cruz Roja en la atención de los usuarios?
En Cruz Roja trabajamos con cita previa y diariamente recibimos a unas 8 ó 10 familias. A pesar de la distancia, tenemos cerca paradas tanto del autobús interurbano, el directo a Sevilla, como el urbano, la Línea 5. Actualmente con las obras de prolongación de la Avenida Santiago Carrillo, el acceso al centro se hace por esta zona y no por la carretera vieja.