Tras la firma de las actas de clausura de las conducciones de restos se pone fin a un acuerdo firmado en el año 1986
La balsa de evaporación y la red de evacuación de vertidos de los restos de la aceituna de mesa de Entrenúcleos ya han pasado a la historia. La junta de gobierno local del Ayuntamiento de Dos Hermanas ha dado cuenta de las actas de clausura de las conducciones que llevaban los residuos hasta esta balsa.
Un procedimiento que tuvo lugar, en palabras del portavoz del equipo de gobierno, Agustín Morón, el pasado día 19 de mayo con presencia de representantes del consistorio nazareno, de la entidad Industriales de la Aceituna de Mesa, así como de los agentes de la Policía Local, encargado de comprobar el cierre de estos conductos y de que en su interior ya no queda nada.
Ahora, según Morón, se procederá al desmontaje de estas instalaciones poniendo fin a un acuerdo de cesión de uso de estos terrenos firmado en el año 1986, así como para la construcción y explotación de una balsa según convenio firmado en 1990. Estos terrenos se destinarán a su uso previsto en el Plan General de Ordenación Urbana.
Historia de un largo proceso
El procedimiento para el desmantelamiento de estas instalaciones se inició en el año 2011, aunque se intensificó un año después tras un acuerdo de junta de gobierno a cuatro bandas entre el Ayuntamiento, Emasesa, Junta de Andalucía y los Industriales de la Aceituna de Mesa, acordándose una prórroga de seis meses.
Dificultades técnicas, así como la aproximación del periodo en el que era más necesario el funcionamiento de la balsa, durante el periodo de recolección de aceituna impidieron el cierre en la fecha prevista. Finalmente se firmaron convenios individuales que posibilitaron la compatibilización de las necesidades de la industria con los intereses de Ayuntamiento y Emasesa, solucionando a corto los problemas con la balsa de evaporación, sobre todo malos olores, y con la red de evacuación, averías y roturas continuas.
La fecha límite para su uso fue el pasado día 31 de marzo, accediendo así a la petición de los aceituneros de mesa para adecuar sus instalaciones a la nueva situación y permitiéndose la utilización de este sistema durante la última campaña. Asimismo, desde el consistorio se ha colaborado con los industriales para facilitar los trámites en los casos en que sea necesaria la construcción de un depósito en sus instalaciones, ayudándoles económicamente para que en la situación actual no supusiese un coste adicional.