El pasado jueves el Servicio Psicopedagógico Municipal organizó un taller de risoterapia, dentro del Programa de Apoyo a la Familia, donde los asistentes compartieron dos horas de alegría.
A lo largo de la sesión disfrutaron de juegos, ejercicios de expresión corporal, baile, musicoterapia y relajación…. Desbloqueando mente y cuerpo, a la par que se abría la puerta de los sentidos, donde los posibles complejos o sentido del ridículo fueron desapareciendo poco a poco y la apertura con las demás personas se hizo total y desde el corazón. La mejor valoración del taller: los rostros de los asistentes, que se marcharon con mucha más luz en sus miradas.