La Guardia Civil busca a Joaquina de los Reyes, gitana que ayer se presentó en casa de la nazarena Aurora Rabaza para adivinarle el porvenir. En la ceremonia, la gitana pidió a Aurora 300 pesetas y una sortija de oro con un brillante y los metió en un periódico, condiciones para que se cumpliera un vaticinio feliz. Lo que le devolvió a Aurora fue una caja cerrada, de la que se llevaba la llave, diciéndole que volvería para abrirla cuando todo se cumpliera. Tras la denuncia, la benemérita ha detenido a Antonio Ríos y Emilio Carrasco, cuñado y sobrino de Joaquina, que desapareció con el dinero y la joya en el primer tren a Sevilla.