El lunes se concentraron a las puertas de Urgencias del hospital
Pedro y Dolores, los padres que denuncian que la falta de atención médica provocó el fallecimiento de su hijo, afectado por un linfoma de Burkitt, el pasado día 28 de julio, se manifestaron el lunes ante las puertas de Urgencias del Hospital Virgen del Rocío para reclamar “que se haga justicia”.
La madre, Dolores Campos, en declaraciones a este periódico asegura sentirse “agotada y psicológicamente cansada” por todo lo que está viviendo, pero va a hacer “todo lo que tenga que hacer; quiero que todo el mundo se entere, que esto salga a la luz pública”. Según denuncia Dolores, su hijo Pedro no recibió la atención médica necesaria. “Yo estaba allí, y lo he vivido durante muchas horas, si lo hubieran atendido correctamente no hubiera pasado nada”. “El médico que pasaba por allí no le daba importancia a los síntomas, decía que todo era normal; pero si le hubieran puesto la sangre y las plaquetas en su momento no estaríamos hablando de esto”.
Reunión con el director
La concentración del lunes por la mañana, en la que la familia de Pedro estuvo arropada por unos 70 familiares y amigos, comenzó en las puertas de Urgencias y se desplazó al edificio de gobierno. En ese momento, el director entraba en el edificio, y ante los gritos de las personas concentradas pidiendo “que diera la cara”, accedió a reunirse con los padres y otro familiar. En la reunión estuvieron presentes el director médico del hospital, el director gerente y la subdirectora médica del hospital infantil, y durante la misma, le explicaron las circunstancias del falleciemiento del menor. Según Dolores, la intentaron “convencer de que mi hijo había fallecido por una infección fulminante, pero yo sé que no fue así, que el médico miraba y no hacía nada”.“Quiero justicia para mi hijo, es todo lo que pido” comenta Dolores. “Si hubiera fallecido a causa de la enfermedad no pasaría nada, pero yo sé que no lo han hecho bien”.