La Hermandad de Santa Ana está experimentando un relevo generacional entre sus filas. Entrevistamos al hermano que ostenta el número uno y a la joven segunda secretaria de la junta de gobierno. Ambos se apellidan García, y no es casualidad, y es que pertenecen a la misma familia.
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Manuel García Rivas, hermano más antiguo
Manuel tiene 90 años, y a pesar de los achaques de la edad, conserva con lucidez muchos recuerdos de su trayectoria en la hermandad. En su casa guarda con cariño los documentos que le reconocen como hermano número uno de Santa Ana y también de Gran Poder.
Desde niño he acompañado a la procesión, en los tiempos en que salía por la mañana y se rociaban las calles de lentisco. Me hice hermano de Santa Ana porque era la patrona, y tenía varios amigos que eran hermanos.
¿Cómo recuerda sus años en la Hermandad de Santa Ana y su relación con los hermanos?
El trabajo no me permitía intervenir mucho en la hermandad, pero recuerdo la asistencia a reuniones, he aprobado cosas y rechazado otras, y he hecho lo que he podido. Siempre ha habido buenos hermanos y muy buenos hermanos antiguos.
¿Qué ha aconsejado a los nuevos hermanos que se han ido incorporando a la hermandad?
La relación con los hermanos ha sido siempre muy buena. He aconsejado lo mejor que he podido, que se administraran los pocos fondos de que disponía la hermandad y que se invirtieran en cosas que no existían, para que a la Santa no le faltara el decoro que todos queríamos.
¿Cómo recuerda los días de la procesión de Santa Ana?
Han sido muchas procesiones. Era un día ajetreado, iba a la iglesia y luego formaba parte de la procesión.
Manuel recuerda cómo ha ido pasando el tiempo, y cómo han cambiado las cosas desde sus inicios en la hermandad de Santa Ana.
La tradición de la iglesia se ha ido perdiendo con el tiempo. No sé si ahora se va a recuperar, dicen que los sacerdotes dirán misas de espalda, como antiguamente.
¿Cómo va a vivir el día de la procesión?
Este año no voy a poder asistir, algún año tendría que llegar, y lo siento, pero quiero que haga su recorrido con su mayor esplendor.
Estrella García Ramírez, secretaria segunda de Santa Ana
La familia de Estrella, de 19 años, está vinculada desde siempre a la hermandad de Santa Ana, por eso ha vivido muy de cerca la vida de la hermandad desde pequeña.
¿Qué recuerdos guardas de tus inicios en la hermandad?
Mis tías eran hermanas y me apuntaron cuando tenía seis o siete años. Desde pequeña he ido ayudando poco a poco, y siempre me ha aportado mucho formar parte de ella. Recuerdo que me gustaban mucho los días de besamanos, prendiendo los alfileres, y las colas enormes de gente yendo a besar.
¿Qué significa para ti la figura de Santa Ana?
Es una imagen que representa el pueblo, la Abuela de los nazarenos, hay una gran devoción. Todo el mundo se siente representado por la imagen de la Patrona, incluso cada vez más gente de fuera de Dos Hermanas, que reside aquí o tiene aquí familia.
Santa Ana parece estar viviendo un relevo generacional. ¿Cómo ves la evolución de la hermandad?
Las personas mayores que han estado siempre en la hermandad saben mucho y aportan muchos consejos que los más jóvenes aceptamos. Pero también hay gente joven que está muy preparada.
El domingo se celebró la imposición de medallas a los nuevos hermanos. ¿Qué te ha llamado la atención de las nuevas incorporaciones?
Había muchos niños pequeños, incluso de tres meses. Se aprecia una evolución, es importante que los padres los vayan acercando, para que la hermandad sea joven y que la hagan crecer.
¿Cómo vas a vivir el día de la procesión?
Es un día en que hay que levantarse muy temprano para prepararlo todo. Va a ser la primera vez que esté en la procesión sentada en la junta de gobierno, es una gran responsabilidad, pero es un día muy bonito y espero que todo salga muy bien. Últimamente parece que la acompañan también en la entrada, espero que poco a poco vaya creciendo la participación, y se vaya superando.