El pasado domingo, día 14, el arzobispo de Sevilla, monseñor José Ángel Saiz Meneses, hizo entrega de la medalla Pro Ecclesia Hispalense a María Oliva e Ignacio Gómez, feligreses de la Parroquia Nuestra Señora de la Oliva y San José Obrero, de Dos Hermanas.
Oliva ha desempañado por más de 30 años el servicio de sacristana. “Deseosa de ser útil y con una determinación y energía que aún conserva a pesar de sus 80 años cumplidos, María ha estado presente en la toma de posesión de los párrocos asignados, poniéndose siempre a su servicio». Pero no solo ayuda en las celebraciones de la Eucaristía diaria, sino cuidando de ornamentos y atuendos de los sacerdotes.
Por su parte, Gómez, nacido en 1942 y criado en un ambiente de fe, “nunca se ha separado de la Iglesia desde que de niño asistiera como monaguillo en aquellas misas que aún recuerda se celebraban en latín”. El homenajeado se enorgullece de tener el número 2 en el libro de hermanos de la Hermandad de Oración en el Huerto de Dos Hermanas. Desde hace más de dos décadas, Ignacio Gómez se encarga de las catequesis prebautismales y de confirmación. “Su entrega, honestidad, cercanía y prudencia son incuestionables”.
Sobre ambos feligreses, el párroco de Nuestra Señora de la Oliva, Diego Román, ha expresado que “desde la creación de la parroquia en los años 60, han sido ellos quienes han estado siempre al pie del cañón, colaborando mucho en todo lo que se les pide. Por tanto, la entrega de esta Medalla Pro Ecclesia Hispalense por parte de la Archidiócesis de Sevilla supone un estímulo de lo que implica el servicio altruista a la Iglesia y el amor al Señor”.
Román ha agradecido también a monseñor Saiz Meneses la deferencia de entregar la medalla directamente a ambos parroquianos.