A la vista de la estadística de ganado yeguar y caballar de Dos Hermanas de 1788, el Consejo de Guerra ha requerido, mediante correo, al Consejo de Dos Hermanas la compra urgente “de un caballo padre para montar a las yeguas vacías”. Esta disposición conminatoria ha causado sorpresa en la villa. Han sido consultados los criadores de yeguas Juan López Tinoco, Cristóbal de Arquellada y Agustín Varela, y todos ellos han sido unánimes en el sentir de que no hace falta tal cosa.