Además de los productos de papelería y oficina, está especializada en todo tipo de libros de texto desde Infantil hasta Bachillerato
Sólo con el nombre que han elegido, Paco y Ester, el alma de Papelería El Quijote, demuestran su amor por la letras. Después de siete años, el negocio ha evolucionado hasta tener una clientela fija, que confía en ellos y que sigue recomendándolos a la hora de comprar, sobre todo libros de texto, desde Infantil hasta Bachillerato. “La ayuda más grande ha sido de los clientes en todos estos años”, dice Paco: “Año tras año confían en nosotros y el boca a boca es lo que ha ayudado a hacer crecer nuestro negocio”. Porque en Papelería El Quijote se puede encontrar de todo en productos de papelería, librería y oficina, pero están especializados en todo lo relacionado con el ámbito escolar: libros de texto, cuadernillos de vacaciones y lecturas de verano, así como material escolar.
Cuando Paco y Ester comenzaron en el negocio, sólo tenían su afición por la lectura y su ilusión. Poco a poco fueron haciéndose grandes profesionales del sector, “siempre preguntando, informándonos, conociendo cada uno de los productos que vendemos”, explica Paco. El mundo editorial cambia constantemente y “es necesario estar al día en modificaciones de temario, editoriales, los cheques libro…”. Esa es una de las claves del éxito de Papelería El Quijote. “No damos nada por sentado. No nos creemos que lo sabemos todo y así siempre estamos conociendo más cosas y ampliando la información que podemos ofrecer al cliente”, apunta Ester. “Nunca nos ha dado miedo preguntar. Y también hemos tenido mucha ayuda de los profesores de los centros escolares así como de los compañeros del sector, que nos han echado una mano siempre”, concluye Paco.
trato personal
Paco y Ester defienden el trato personal y cotidiano, típico del comercio tradicional, en su establecimiento, huyendo del “autoservicio que tanto se lleva ahora”, dice Paco. Por lo que, más que clientes, algunos incluso ya son amigos. Para llegar a eso, en El Quijote hacen todo lo posible para que el cliente se sienta a gusto y despreocupado una vez que hace su pedido. Paco cuenta que muchos llegan incluso sin la lista de los libros, porque saben que ellos conocen a la perfección qué se pide en cada centro, incluso si ha cambiado recientemente. “Como profesionales, hacemos nuestro trabajo. El cliente llega, hace el pedido y ya se despreocupa. Aquí empieza nuestro trabajo, pidiendo los libros y dándole la máxima garantía de que estarán a tiempo y sin errores”, explican.
Este sistema, que hace que el pico máximo de trabajo sea en julio y agosto, provoca que para septiembre todos los clientes tengan sus pedidos, ya que Paco y Ester se encargan de ir llamando conforme van llegando. “Ha sido difícil acostumbrar a los clientes a que hagan el pedido con antelación, pero ahora se alegran. Así, se evitan los problemas de falta de existencias en septiembre”, comentan los libreros.
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Una vez el pedido está en la librería y el cliente llega para adquirirlo, Paco y Ester explican con total detalle cuáles son los ejemplares que han llegado y atienden de manera completamente personal a los padres, que suelen tener muchas preguntas. “Por eso los clientes confían en nuestra profesionalidad”, dicen orgullosos. “Nuestro objetivo es conservar el trato humano, ser cercanos, escuchar al cliente. Da gusto trabajar así”, apostilla Ester.
Recomendaciones para el verano
Muchos son los padres que llegan a Papelería El Quijote preguntando por cuadernillos para las vacaciones. Dado su conocimiento del mundo editorial, Paco y Ester recomiendan a cada uno según las necesidades del escolar. “Eso lo da conocer muy bien los productos y el hablar mucho con los padres y profesores”, explican.
Papelería El Quijote
C/Doctor Fleming, 34
Teléfono 955664976
