La víctima no ha sufrido daños importantes y ya ha sido dada de alta.
El pasado viernes, día 12, un atleta paralímpico que estaba entrenando con su silla de competición, una silla especial, de poca altura, que va muy pegada al suelo para ganar en aerodinámica, fue víctima de un accidente de tráfico. El conductor de un coche, que circulaba por la misma zona, fue deslumbrado por el sol y no vio con la suficiente antelación al minusválido, por lo que no se percató de su presencia y tardó un poco más en frenar, golpeando al atleta por detrás.
Afortunadamente la víctima no sufrió daños mayores, sólo una erosión en su barbilla y algunas contusiones, siendo trasladado al hospital de inmediato. En ningún momento el accidentado perdió la conscienci y ya ha recibido el alta médica.