Además de la sala ‘dance’, más amplia y genérica, la Discoteca ‘B3’ completa su oferta de ocio con dos salas más, temáticas y exclusivas, así como independientes de la primera, que se ubican en la primera planta del edificio.
La primera de ellas, de 650 metros cuadrados de amplitud, está inspirada en un palació hindú en el que no falta ni un solo detalle. Suelo de mosaico, mucha madera, terminaciones en alabastro, zona de cómodos sofás con cojines y tejidos llenos de color dotan a esta sala de la armonía y relajación de un templo hindú.
Pero, para no olvidar su filosofía de sala de baile, las luces y la música también cobran protagonismo en esta estancia que ya es una de las preferidas por la clientela de la sala de fiesta.
Las dependencias se completan con una tercera sala, algo más pequeña, de 330 metros cuadrados, que adopta el estilo de las salas de fiesta de Miami Beach. El blanco y el cuero se conjugan a la perfección en una de las estancias más camaleónicas, ya que los juegos de luces provocan que su ambiente se adapte a todo tipo de tonalidades cromáticas, desde el rojo al verde, pasando por los tonos azules. El plato fuerte de esta sala es la enorme cristalera que se convierte en el mirador de la discoteca de cara a la vía pública.
Horarios y cualidades
La discoteca abrirá sus puertas al público de jueves a sábado de 0:00 a 7:00 horas. Sin embargo, el domingo, la sala abre sus puertas más temprano, a las 17:00 horas, sólo con la sala hindú y la hispana, para ambientes más tranquilos y aptos para una tarde dominical.
Entre las posibilidades que se ofertarán para sus clientes, aunque aún están por definir, con tan sólo un fin de semana de vida, destaca la posibilidad de poder reservar algunas de las estancias para un ambiente más privado.
Pase especial
Para dar a conocer la discoteca tanto a amigos, proveedores, como antiguos clientes de sus propietarios, se organizó en la noche del jueves un pase privado, en el que no faltaron invitados VIP, como miembros del Ayuntamiento de Dos Hermanas y otras caras conocidas del mundo del espectáculo y del deporte, que quisieron pasarse por la discoteca para conocer de primera mano todo lo que se había hablado de esta imponente sala de fiestas nazarenas.