Con el cartel de no hay localidades, el teatro municipal recibe mañana jueves, día 20, y el viernes, día 21, a las 21:00 horas, al dúo humorístico Los Síndrome. Vienen a presentar la obra Justo a tiempo, con la que hacen un repaso de la gestión del tiempo desde el prisma del humor.
Segunda visita al teatro municipal de Dos Hermanas, con una nueva doble función, y, de nuevo, localidades agotadas. ¿Cómo se afronta esta cita con esa perspectiva?
Es una mezcla de satisfacción, porque después de 20 años en esto ves que al final da sus frutos y ha merecido la pena, y sorpresa, ya que en teatro no es habitual agotar las entradas en pocas horas como nos ha ocurrido en las dos ocasiones que hemos venido a Dos Hermanas. Esto suele ocurrir con actores que están en TV, que no es nuestro caso, o en conciertos de grupos de música. Pero como quiera que sea estamos encantados y deseando de que haya una tercera vez.…
Hace unos meses nos enseñaron que Mejor… es posible. ¿Qué vamos a aprender ahora con Justo a Tiempo?
En esta ocasión abordamos un tema no menos fundamental para nosotros: EL TIEMPO, con mayúsculas. Nuestra relación con él: cómo lo queremos «ganar» (como si eso fuera posible), cómo lo perdemos (y después nos sentimos culpables) o cómo deseamos que algunas veces pase rápido y otras lentamente (algo que sólo es fruto de nuestra propia percepción del mismo). A través del humor, daremos las claves para gestionar bien nuestro día a día.
Había un dicho que decía que «la letra con sangre entra”. ¿Habéis aprendido con vuestros espectáculos que el humor es mejor arma?
En nuestro caso nos gusta decir que “la letra, con RISA, entra mejor”. Hemos comprobado en nuestros ocho espectáculos que si te ríes con algo y te ríes de ti mismo se aprende más. La risa además de necesaria e imprescindible como válvula de escape para el ser humano, también es una gran arma para aprender cosas que sin humor se nos olvidarían.
Hemos comprobado que, si te ríes con algo y de ti mismo, aprendes más
Cuando Víctor y Práxedes suben a un escenario, ¿cuál es vuestra seña de identidad y lo que os diferencia?
Siempre decimos que somos payasos para adultos, que también existen. Trabajamos la pareja clásica de toda la vida: el payaso listo y el payaso ingenuo. Y hoy en día hay muy pocas parejas de payasos en nuestro panorama teatral. Hemos encontrado una fórmula original, divertida y que al público le gusta: dos adultos peleándose y a la vez divirtiéndose como niños encima de un escenario. Nosotros encantados…
¿Qué significado tiene esa nariz roja tan presente en vuestra imagen?
Es la máscara más pequeña que existe. El payaso con su nariz roja puede decir auténticas barbaridades, reírse de cosas y tratar temas que para otros sería impensable. Porque lo hacemos desde la ingenuidad, como los niños (siempre dicen la verdad, no saben mentir). Y eso que criticamos o eso de lo que nos reímos puede doler un poco, pero en el fondo todo el público estará viendo que es cierto…
Después de 20 años de relación artística, ¿cuál es la clave para durar tantos años juntos sobre los escenarios?
La clave es una mezcla de factores: trabajar mucho, mostrar profesionalidad y respeto hacia todos los proyectos que afrontamos y tener muy claro que esto no son los cien metros lisos (que se acaban siempre muy pronto).
Viendo que el formato conferencia o coaching os funciona, ¿tenéis en mente nuevos proyectos en esta línea?
De momento con esta fórmula del Teatro Conferenciado o la Conferencia Teatralizada ya llevamos dos producciones: Mejor… es posible y Justo a Tiempo. Pero ya estamos dándole vueltas a otros temas tan universales y fundamentales para el ser humano, como podría ser el sexo de los calamares, si corre más un galgo que un mastín o el precio de la cerveza en los bares. Y por supuesto volver pronto a Dos Hermanas con un nuevo espectáculo, si el público así lo desea.