En la madrugada del sábado los coros de Dos Hermanas cantaron a la Inmaculada
La plaza Ménendez Pelayo, popularmente conocida como la plazoleta, acogió la noche del viernes al sábado la actuación de varios coros nazarenos ante el monumento de la Virgen de Valme. El ambiente navideño se respiraba por doquier en la vigilia de la Inmaculada. Las voces de los componentes de los distintos coros y el sonido de los instrumentos recordaban que ya estamos más cerca de la Navidad.
Actuaron los coros de Ibarburu, Las Portadas, Amanecer, el de Consolación y el coro de la Hermandad de Valme, cuyos componentes, en su mayoría gente joven, no dudaron en hacer un bis una vez terminadas las actuaciones.
Cada coro dio lo mejor de si mismo, cantando y tocando villancicos populares y composiciones propias en diversos estilos, unos más tradicionales y otros más aflamencados.
A partir de esta actuación en honor de la Inmaculada Concepción, ya tradicional pues se repite año tras año, los coros cambian su repertorio habitual por villancicos y los campanilleros llenarán las calles de Dos Hermanas.