Carlos Campano consiguió en la segunda prueba del mundial MX-3 salir indemne en la lucha con una legión de pilotos franceses y de un circuito duro como el asfalto y con muchísimas piedras y polvo, lo que le permite seguir comandando la clasificación general de la categoría.
En la región de Castelnau de Levis se celebró quizás la carrera más difícil del año, en la que Carlos, con un segundo y un cuarto puesto, demostró que lo de la carrera de Portugal no fue casualidad.
Tras los entrenamientos clasificatorios el nazareno salió sexto en la primera manga de la cita, consiguiendo tomar pronto la primera plaza, aunque finalizó en la segunda, por delante de su directo rival Alex Salvini, al no encontrarse cómodo en el circuito.
Pese a salir mucho más a gusto en la segunda, un tropiezo con otros corredores y el gran desgaste de sus gomas le dejó relegado a la cuarta. Pese a todo, no baja del podio de la general.