Las familias de clase media en paro, nuevo perfil del demandante
Dos Hermanas también forma parte del nuevo mapa de la pobreza. Así aparece en la campaña nacional que Cáritas acaba de presentar, Este es el nuevo mapa de la pobreza, que en el caso de Dos Hermanas se ha personalizado con los datos de sus centros parroquiales. Lo que Cáritas pretende es alertar, con esta nueva campaña, de que “la pobreza ya forma parte de nosotros y de que la crisis afecta a personas cercanas”.
La campaña es de promoción para la captación de nuevos socios y donantes que, con sus recursos económicos, hagan posible que Cáritas lleve a cabo su labor; así como de sensibilización con el fin de informar a la sociedad del incremento en la atención primaria que está sufriendo este organismo.
Cáritas Arciprestal de Dos Hermanas ha formado un equipo itinerante que visitará, además de las parroquias, los colegios y las asociaciones de vecinos, para informar de esta realidad.
Para ello se repartirán unos folletos en los que se recuerda, entre otros aspectos de interés, que Cáritas es la mano solidaria de la Iglesia y de que con su red de 10 centros de atención primaria se llega a todo el municipio nazareno. Asimismo, este equipo informará sobre el desbordamiento en la atención primaria de todas las parroquias nazarenas, que han tenido que aumentar los días de atención para hacer frente a tan ingente demanda.
Como complemento, Cáritas colgará en su web, www.caritasdoshermanas.org, un vídeo con el fin de reforzar las ideas de esta campaña.
Mucha demanda
Como media, las Cáritas parroquiales han duplicado las familias atendidas, triplicándose en algunos meses puntuales, como la pasada campaña de invierno. Este es el caso de la parroquia del Ave María y San Luis, que atiende en la actualidad a 150 familias.
La crisis ha incorporado a la asistencia primaria un nuevo perfil de personas necesitadas: familias de clase media, en paro y que suelen cargar con una hipoteca. Asimismo, se ha vuelto a la demanda clásica de los alimentos, como ayuda básica.
Todos estos cambios han propiciado que Cáritas vuelva a estar necesitada de una nueva red de voluntarios que se unan a sus centros de atención para reforzar su labor. En este aspecto también se va a incidir en la campaña.