La ciudad de Dos Hermanas ha vivido este viernes, día 14, una jornada histórica en torno a su Patrona con motivo de la conmemoración del V Centenario de su hernandad. Una jornada que ha servido para reafirmar las señas de identidad del municipio en torno de Santa Ana con la presentación de dos obras. Por una parte, un cartel conmemorativo de esta efemérides, realizado por Juan Miguel Martín Mena, y un monumento en relieve, en uno de los muros de la Torre del Olivar, obra del imaginero Antonio Luis Troya Román.
Cinco veces centenario
La capilla de Santa Ana acogió la presentación del cartel conmemorativo del V Centenario. Un acto que contó con la presencia del alcalde, Francisco Rodríguez García, y el presidente del Consejo de Hermandades de la ciudad, Fran Alba. Según explicó la hermana mayor, Eva María Ramírez, «desde el primer momento pensamos en Juanmi por su valía como artista y porque es nazareno por los cuatro costados, viviendo sus devociones, especialmente la de Santa Ana». Por ello, tras la presentación del cartel, la hermandad quiso tener un detalle con el artista, haciéndole entrega de un pañuela, que ha estado muy cerca de la Santa, dentro de un cofre de madera con la imagen en su tapa del relicario con los tres objetos encontrados junto a la Imagen en la cueva: la campana, el rosario
Cinco veces centenario es el título del cartel realizado por Juan Miguel Martín Mena con motivo del V Centenario de la Hermandad de Santa Ana. Uba obra realizada en técnica mixta sobre papel de algodón encolado a un tabla de 80 por 120 centímetros Para ello ha utilizado acuarela, grafito, bolígrafo, acrílico y transfer.
Según ha explicado el propio autor, «lo he querido tratar con una intención más íntima y personal, un paso más decidido en mi evolución artística con un estilo más contemporáneo«. Juan Miguel tenía claro que quería mostrar «el rico pasado de esta Corporación, resaltando el espíritu joven que respira actualmente y que deja la puerta bien abierta al futuro«. En definitiva, «poner en valor el caracter atemporal de la germandad y su permanencia en los tiempos tanto pasados como venideros».
Cinco veces centenario es «una visión de la devoción y peso histórico de la imagen de Santa Ana a través de su hermandad». Para ello, la Imagen se presenta en su talla original y se refleja en su característica ráfaga los textos originales de las reglas de la hermandad. Este mismo recurso ha sido usado por el autor en el manto que, «con un patrón casi futurista se intenta acercar al magnifico diseño que ha realizado Miguel Ángel Clarós para la prenda que bordará, en un futuro muy cercano, Dolores Fernandez«. Esta prenda es muestra, asegura Juanmi, «de la inquietud de esta Junta de Gobierno por seguir afianzando una iconografía definitiva a nuestra Celestial Patrona».
Dos jovenes Elvira y Estefanía se visten de los mismos azulejos de la capilla y por los que «tantas manos cargadas de plegarias y agradecimientos han pasado a lo largo de la historia de este pueblo» Estas dos mujeres protegen un corazón en forma de Granada , símbolo de la Santa, y símbolo también de comunidad y fertilidad. El fruto, «abierto en Cañal, echa sus raíces en esta tierra y despliega sus ramas como verdaderas arterias de un corazón latente, ramas de los olivos centenarios que afianzan nuestra cultura y signo de identidad nazarena».
Reafirmar las señas de identidad
El alcalde agradeció a la hermandad el que lo hubiesen invitado a compartir «un día histórico tanto para ellos como la ciudad, ya que la entidad con más historia del municipio cumple 500 años de vida». Tras su investidura como alcade, Francisco Rodríguez se puso el compromiso de «potenciar la historia, cultura y tradiciones de esta ciudad y, para reforzar lo que hoy es Dos Hermanas, una gran ciudad, hay que reafirmar sus señas de identidad». Francisco Rodríguez recordó el compromiso adquirido con la hermandad para que Santa Ana tuviese un monumento en la ciudad, que este día veía la luz, así como el de conceder la medalla de la ciudad, que será entregada el próximo día 25 de abril en un acto en el teatro municipal. Además, el lunes, día 17, a las 21:00 horas, abre sus puertas una exposición sobre este quinto centenario, de la mano del historiador Jesús Barbero.
Santa Ana ya tiene su monumento
Antonio Luis Troya Román se enfrentaba al difícil reto, según él mismo explicó tras descubrir el monumento, «de hacer una obra escultórica de los 500 años no solo de la hermandad, sino de la historia de la ciudad«. Las dos hermanas son las que dan nombre a la ciudad, «por lo que había que representarlas sí o sí en este relieve, además de ser las que descubrieron a Santa Ana en esa cueva. que aparece en el fondo con un modelado muy superficial».
En alto relieve aparece en el centro la Santa y, a ambos lados, Elvira y Estefanía, las hermanas. «Y, cómo no, tenían que estar junto a Santa Ana unos niños, que no podían ser otros que unos querubines, pero que representan a los niños de la ciudad, los de las generaciones futuras que seguirán estando aquí».
Antonio Luis quiso dar las gracias al «señor alcalde y a su equipo de gobierno por la plena confianza que siempre han tenido en mí. Además de dejarme trabajar desde el primer momento y expresarme como artista, como me salía del alma». Así como en la hermandad «por confiar en mi trabajo y darme total libertad«.
En su intervención, la hermana mayor, Eva María Ramírez afirmó que «hoy se cumple un sueño, el de una hermandad, el de un pueblo, cuyo cumplimiento era una cuestión de justicia». Hoy, añadió, «descubriremos el homenaje en forma de monumento que el amor de un pueblo le rinde a su patrona«. Cualquier forastero, profundizó en su discurso, «podría juzgar como extraño que la Patrona no haya tenido hasta ahora un monumento en su honor» y, añadió, «me consta que muchos vecinos habían demandado que este deseo se materializara al fin».
Pero, explicó, «yo soy una mujer de fe y creo en la providencia, por lo que estoy convencida de que las cosas ocurren cuando tienen que ocurrir. Y que si el Señor y su bendita abuela han querido que sea ahora por algo será». Por lo que estamos ante «un día de júbilo para todos los nazarenos y nazarenas, para los que sienten devoción por la Santa, pero también para los que no comparten nuestra fe, ya que lo que vamos a hacer es reafirmar las señas de identidad de nuestro pueblo«. Y no es otra que «la vinculación secular a Santa Ana desde los mismos orígenes de ser como nazarenos».
Eva también quiso agradecer al alcalde y su corporación, «por su acogida, por su escucha, por estar siempre lo suficientemente cerca para hacer suyo desde el primer instante nuestro anhelo, cuando acudimos a él con esta petición y se comprometió a estudiarla». También tuvo palabras de agradecimiento para el autor de la obra, Antonio Luis Troya, «al que conocemos desde hace años, cuando apenas era un chiquillo y ya se adivinaban trazos de maestría en su arte«. Y es que afirmó «tenemos en nuestro pueblo una pléyade de jóvenes artistas que tienen que ser profetas en su tierra, ya que fuera de ellas ya han sido capaces de conmover el corazón de muchos desde su trabajo». Antonio Luis «no es escultor, es imaginero porque su profunda fe y su amor a sus tradiciones son los que guían sus manos escapen esas obras capaces de llevarnos a Cristo, a su bendita Madre y, en este caso, a su abuela Santa Ana». Por lo que, sentenció, «hoy Dos Hermanas es aún más grande, si cabe, porque le ha hecho justicia a su Patrona».