Carolina Robles se ha proclamado este fin de semana campeona de España absoluta en 3.000 metros obstáculos. La atleta nazarena, de la barriada de Montequinto, ha logrado su sueño en el campeonato disputado en la localidad malagueña de Nerja. Logrando, además, marca personal y récord de los campeonatos.
Carolina se medía en esta prueba, en la segunda jornada del campeonato, a la atleta toledana Irene Sánchez-Escribano,que se presentaba en esta edición con el objetivo de revalidar título y superar el récord de los campeonatos.
La atleta quinteña también corría con el objetivo de lograr la mínima para el Campeonato del Mundo de Oregón, fijada en 9:30:00, pero se ha quedado a dos segundos de lograrlo, 9:32:24. Lo que sí espera es poder entrar en la Selección Española para el Mundial de Eugene de este mes de julio. De no ser así, sí tiene mínima, al ser campeona de España para el campeonato europeo.
Esfuerzo supremo
Según publicaba la Real Federación Española de Atletismo, parecía que la toledana Irene Sánchez-Escribano y la nazarena Carolina Robles llegaron a un acuerdo para mantener un ritmo de carrera para una marca final inferior a 9:30.00. Ambas colaboraron y fueron intercambiándose en cabeza, relevándose a la perfección. Se pasó el 1.000 en 3:09.29 y el 2.000 en 6:23.04. En este momento, según confesaba Robles, «me he quedado sin fuerzas, pero han podido las ganas de estar aquí y de seguir luchando por la mínima».
En las dos últimas vueltas fue más fuerte Robles, que se despegó de Sánchez-Escribano, y voló hacia la meta. Ambas, en un esfuerzo supremo, lucharon lo indecible en la última vuelta intentando la mínima. Pero su esfuerzo no tuvo el premio, la guinda de la mínima, aunque aseguraba «estar satisfecha, ya que ha sido una carrera intrigante«.
Tras la llegada a meta, y muy emocionada, Carolina Robles declaraba ante los medios que «Me va a costar hablar porque llevo mucho tiempo persiguiendo esto. Se me ha escapado muchas veces por poco y conseguirlo con mis padres aquí es un orgullo tremendo. Antes no se dieron las circunstancias al pasar por una pequeña enfermedad, pero aun así me planteé competir y pensaba que lo iba a conseguir. No fue y me dolió muchísimo, pero era algo que no podía controlar. Haberme repuesto y poder ganarle aquí a una rival como Irene, enorme, quedándome tan cerca de la mínima, es un orgullo para mí».
Foto del artículo: Miguelez Team.