Nuestro lugar de trabajo es uno de los escenarios donde más transcurre nuestra vida. En el mundo de hoy es normal que pasemos más tiempo en nuestras oficinas y lugares de empleo que en casa. Eso hace que seamos más susceptibles a sufrir accidentes y eso tiene una suerte de garantía laboral para el trabajador. El derecho del trabajo ha desarrollado diferentes herramientas jurídicas para proteger a la parte débil de la relación: el empleado. Por eso, el derecho laboral tiene una naturaleza tuitiva y los trabajadores pueden resultar acreedores de una indemnización. Quédate en este artículo y te contamos todo lo que debes saber para gestionar legalmente una incapacidad permanente en Sevilla.
¿Qué se considera un accidente laboral?
Se categoriza como accidente de trabajo todo suceso repentino por causa o con ocasión del trabajo, que dé lugar a una lesión al trabajador. La perturbación puede ser física, emocional, funcional o moral. Así lo ha regulado la ley de seguridad social Un accidente de trabajo no puede reducirse solamente a aquel que ocurre dentro de las instalaciones de trabajo, sino que también puede configurar en virtud del cumplimiento de una orden del jefe que se desarrollaba por fuera del espacio físico.
Por ello, se ha considerado que los accidentes que tienen lugar en los traslados hacia y desde el trabajo se ponderan como accidentes laborales. El empleador tiene la carga de suministrar los elementos de protección necesarios para reducir riesgos en la ocurrencia de estos accidentes. Pero, en caso de que tengan lugar, el empleador tendría que pagarle una indemnización al trabajador.
¿En qué casos corresponde una indemnización?
Los trabajadores, con ocasión de un accidente de trabajo, pueden ser beneficiarios de una indemnización, siempre y cuando la lesión haya generado secuelas. En algunas circunstancias, los accidentes de trabajo se producen por falta de medidas de prevención de riesgos laborales. En este caso, además se percibirá un incremento del 30% al 50% de la prestación que origine el accidente. En cualquier caso, si el accidente de trabajo supone una baja médica, el trabajador tendrá derecho, además, a una prestación por incapacidad temporal, sin necesidad de reunir periodo de cotización previo y prestación de incapacidad permanente, en caso de que las secuelas le impidan de forma continuada ejercer su profesión habitual o cualquier profesión. Aparte de ello, si el accidente de trabajo se produjo por falta de medidas de seguridad laboral, se solicitará el recargo de prestaciones (sobre la incapacidad temporal y/o permanente), del 30% al 50%.
¿Qué hacer en el marco de un accidente de trabajo?
Tras sufrir una incapacidad permanente en Sevilla, para tramitar adecuadamente un accidente de trabajo y poder ser beneficiario de las indemnizaciones y demás pagos, es necesario el cumplimiento de estos tres pasos:
- Informar: Se debe poner en conocimiento a la empresa sobre la ocurrencia de un accidente de trabajo. La denuncia deberá colocarse también ante la Inspección de Trabajo y Seguridad Social. Para lograr el pago de indemnizaciones se deben poner en conocimiento al Juzgado de lo social, quien es competente para conocer de estos casos.
- Solicitud de atestado: Si tras el accidente laboral han intervenido Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado (Policía Nacional, Policía local y Guardia Civil), se deberá solicitar Atestado de lo ocurrido y actuaciones que se hayan llevado a cabo, incluyendo diligencias de oficio ante el Juzgado de lo penal por presunto delito contra la Seguridad de los Trabajadores.
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