Tenía claro que el bullying iba a ser el tema que abordase en su segundo cuento ilustrado y así ha sido. Manuel Colorado Acal, “un niño que tuvo problemas de dicción con la erre y que, por eso, era motivo de burlas”, presenta Bullying en el bosque. Lo hace cuatro años después de Koski, publicado en 2021, y que tenía a los animales de compañía y sus cuidados como protagonistas.
Este segundo álbum ilustrado, al igual que el primero, está destinado a niños y niñas de 3 a 9 años. Gloow es el protagonista de esta historia. “Un ogro que es expulsado de Gloowlandia porque es bueno y diferente al resto”, explica Manuel. Este ogro bueno, prosigue, “se refugia en un bosque donde los humanos de un poblado cercano le hacen la vida imposible”. Es a través del personaje de un hada mágica que Gloow soluciona este problema.
Manuel es autor tanto del texto como de las ilustraciones, “realizadas al estilo cartoon, con colores muy llamativos y líneas muy claras para que llame la atención de los más pequeños”.
El principal mensaje que emana de Bullying en el bosque es “buscar la empatía de los pequeños lectores para que aprendan a ponerse en el lugar de otra persona con sus diferencias”.
El cuento se completa con unos dibujos para colorear e incluye lápices de colores.
30 de enero
a las 18:30 horas se presenta en el salón de usos múltiples de Huerta Palacios este nuevo cuento.
Disfrutando con el proceso
Manuel Colorado Acal afrontó este segundo proyecto de literatura infantil “más lentamente”, ya que “quería disfrutar con el proceso”. Por ello, se ha ido desarrollando durante año y medio. Primero, recuerda, “improvisé el personaje principal y, a partir de ahí, fue saliendo la historia”. Una vez que ya tenía el storyboard, con el guion de la historia, “fui creando los personajes secundarios”. Todo este proceso, puntualiza el autor, “de manera manual y ya, a continuación, lo fui digitalizando”.
Manuel ya baraja próximo proyecto literario y no descarta centrarse en la ilustración de historias que escriban otros autores. Además, le gustaría quitarse la espinita de poder concluir un libro de cómic, ya que no ha podido hacerlo antes.
Dibujante antes que lector
Manuel Colorado Acal recuerda que aprendió a dibujar antes que a leer. Sus primeros libros, como lector, fueron los de Mortadelo y Filemón. Por ello no es extraño que siempre se haya sentido más a gusto dibujando cómic y caricaturas. Hace unos años, comenzó a sentir curiosidad por las ilustraciones y, de ahí, surgió la ida de su primer cuento ilustrado, Koski, al que le ha seguido este segundo, Bullying en el bosque.