La Policía Local y los Bomberos de Dos Hermanas han completado su misión voluntaria en la Comunidad Valenciana, a donde se han desplazado para colaborar en la recuperación de las zonas más afectadas por el paso de la DANA a finales de octubre.
14 bomberos en la zona
Tres han sido los retenes de bomberos que se han desplazado hasta Valencia durante 15 días. El primer grupo con seis efectivos y los otros dos, con cuatro cada uno. Cada uno ha permanecido en la zona durante cinco días.
Esta colaboración voluntaria de los bomberos nazarenos surge de forma espontánea, mientras veían la magnitud del suceso en los informativos. Uno de los implicados, David Bono, es valenciano de nacimiento, aunque lleva 18 años en Dos Hermanas. En Torrent, uno de los municipios afectados, aunque no en gran medida, sigue teniendo a su familia.
Los bomberos se desplazaron, explica David, “en un vehículo del servicio municipal de extinción de incendios y otro auxiliar”. Su labor se ha desarrollado en Catarroja, uno de los municipios más afectados, centrados, sobre todo, en “liberar las vías de acceso para que pudieran entrar las maquinarias o vehículos de emergencia”. Además, apunta, “de ir atendiendo las incidencias puntuales que iban surgiendo”.
David confiesa que , una vez allí, “te sobrepasa la situación y no tiene nada que ver lo que sale en televisión, es como si un tsunami hubiese arrasado con todo”. Por ello, añade, “nosotros que en nuestras intervenciones solemos poner orden en el caos durante los primeros minutos, hemos sentido impotencia de no poder actuar con la rapidez que estamos acostumbrados”.
Frente a esta situación catastrófica, “lo que más nos ha llenado es la respuesta y la solidaridad de la gente, ya que no te faltaba de nada, ni agua ni comida, además de la gratitud de los vecinos”.
12 policías locales
12 agentes de la Policía Local también ha estado varios días en Valencia aportando su granito de arena. Hasta allí se desplazaron en un patrullero y un vehículo de nueve plazas cedido por Autocares Lemus.
Los agentes nazarenos actuaron en Paiporta, la zona cero de la catástrofe, con diferentes funciones, desde custodiar una biblioteca municipal con ayuda humanitaria a colaborar sacando lodo de un subterráneo. Pero, sobre todo, con la regulación del tráfico para que pudiera trabajar la maquinaria.
Según explica uno de los agentes, “nuestra primera impresión es que estábamos en un terreno devastado, como si hubiera habido una guerra, pero sin batalla”. Sorprendiéndoles a todos la solidaridad de la población, ya que “si España no se vuelca como lo ha hecho, no se podría avanzar como se está avanzando”.
La idea de estos agentes de la Policía Local es volver a Valencia más adelante, “ya que aún queda mucho trabajo por hacer”, sobre todo, puntualizan, “cuando se enfríe la ayuda”.