Con la llegada de la Cuaresma, las agrupaciones parroquiales y hermandades de penitencia de la ciudad cumplen con la tradición de vestir a sus Vírgenes de hebrea. Una tendencia que se inició en Sevilla, al parecer, a principios del siglo XX por el bordador Juan Manuel Rodríguez Ojeda, concretamente, después de los sucesos de 1936.
En aquella época, las imágenes solían ir vestidas de negro, ya que no poseían tantas vestimentas como en la actualidad. Por ello, Juan Manuel apostó por vestir a las Vírgenes de hebrea, empleando para ello telas de bajo coste, como raso o terciopelo liso.
María Santísima del Carmen de la Agrupación del Prendimiento.
Ntra. Sra. de las Angustias de la Agrupación de la Misericordia.
María Santísima de la Paz de la Agrupación de las Tres Caídas.
Ntra. Sra. del Pilar en su Mayor Dolor de la Hermandad de la Humildad.
Nuestra Señora de la Estrella. Hermandad de la Borriquita.
María Santísima de la Esperanza de la Hermandad del Cautivo.
Ntra. Sra. del Amor y Sacrificio de la Hermandad de la Santa Cruz.
Ntra. Madre y Señora del Amparo de la Hermandad de Pasión.
Ntra. Madre y Señora de los Dolores de la Hermandad de Oración.
Ntra. Señora del Amparo y Esperanza de la Hermandad de la Cena.
María Santísima del Mayor Dolor de la Hermandad de la Vera-Cruz.
María Santísima del Mayor Dolor y Traspaso de la Hermandad del Gran Poder.
Nuestra Señora de la Amargura de la Hermandad de la Amargura.
Nuestra Señora de la Soledad de la Hermandad de Santo Entierro.
Además de las Vírgenes de Hebrea, otras advocaciones de Gloria también se visten acordes con estos tiempos de Cuaresma, haciendo uso de los colores penitenciales.
Nuestra Señora de Valme de la Hermandad de Valme.
Divina Pastora de las Almas de la Hermandad Sacramental.